Comunicación propia

Convencidos de la importancia de la Comunicación Popular para romper el cerco informativo que impone el sistema hegemónico sobre el quehacer diario de los trabajadores, la CTA Autónoma de la provincia de Córdoba sostiene desde 2018 con mucho esfuerzo, dedicación y entusiasmo su propio sitio en la web. Una Agencia de Noticias con información y opinión.
La prensa del régimen capacita a sus propios periodistas con el formato ideológico que comulga con sus intereses dominantes. Por eso desde la CTA Autónoma venimos planteando desde siempre la necesidad de avanzar en los medios de comunicación propios y formar a los trabajadores de la comunicación con otra matriz, que incluya el ejercicio del trabajo autogestionado.
Desde acá lidiamos sin concesiones contra los que se la pasan falseando la verdad en el altar de los que mandan –por 30 monedas o por sumas millonarias-, saqueando la confianza pública, codeándose con la escoria de los ’servicios’ para difamar al que piensa y actúa diferente, enfrentando la escandalosa concentración mediática y con el compromiso de no callar, de seguir dando testimonio de las alegrías y penas de nuestro pueblo.
La proliferación de medios barriales, locales, regionales, comunitarios en los diferentes soportes que actualmente habilita el desarrollo tecnológico, va forjando la articulación, todavía incipiente y deficitaria, de una Red de Comunicación Popular que se erige como el mejor antídoto al oligopolio comunicacional.
La objetividad y, por tanto, la neutralidad no existen. Cada uno es cada cual y opina según su concepción del mundo, la gente y las cosas. En nuestra condición de trabajadores de la comunicación escribimos, informamos, opinamos  con absoluta pasión y subjetividad, descreídos de la imparcialidad con la que disfrazan su discurso resignado y posibilista los corifeos del sistema.
La soberanía comunicacional no se declama, se ejerce. Y para ello es necesario voluntad política, conciencia colectiva y fuerza popular organizada. La disputa a fondo con el poder reclama coherencia. No admite fuegos de artificios ni doble discurso. Por eso es tan importante que a la hora de informarnos empecemos por casa. Primero hay que leer, ver y escuchar lo que dicen nuestros propios medios. De lo contrario, nos pasamos perdiendo el tiempo discutiendo la agenda que impone la oligarquía.

Es hora de repensar al sujeto de este noble oficio en clave colectiva, para que la comunicación se sustente en la verdad, que siempre es revolucionaria, respetando a rajatabla los postulados fundacionales que marcan nuestra identidad desde el “Grito de Burzaco”: Autonomía de los patrones, los gobiernos y los partidos; Afiliación Directa; Libertad y Democracia Sindical.

Las trabajadoras y trabajadores públicos y privados; activos y jubilados; autogestionados; discapacitados; de la ciudad y del campo; de los pueblos originarios; registrados y precarizados que luchamos contra los despidos
y el achique del Estado; los que defendemos la asamblea, la huelga, los derechos humanos, la cultura popular, los bienes comunes; quienes salimos a la calle por los derechos de las mujeres y disidencias, por el presente de los niños y niñas, las y los jóvenes; que creemos que la unidad popular y latinoamericana es el camino y que nuestra misión principal es aportar a un nuevo Proyecto de Emancipación promoviendo organización y construyendo poder popular, tenemos nuestro medio propio.