Desde 2015, es descomunal la pérdida de poder adquisitivo del trabajador y del jubilado

Sueldo. Salario. Haber. Remuneración. Cualquiera sea el sinónimo utilizado, su poder de fuerza en el bolsillo de los argentinos va debilitándose año tras año. Desde 2015 hasta 2018, los números son aterradores y tanto el trabajador como el  jubilado perdieron cifras siderales, mira.

Según el último estudio realizado por el Centro de Economía de la Política Argentina, el poder adquisitivo del haber mínimo, en base a la medición del INDEC y el Relevamiento de Expectativas de Mercado, avalado por el Banco Central, se retrajo 19,5% en comparación de la medición que va desde  2015 y 2018. Esto arroja un resultado de pérdida del valor de los ingresos mínimos del sector asalariado de unos $1.814 mensuales, considerando la jubilación mínima de $9.306 en diciembre de 2018. Allí, en ese cálculo, es donde se perdieron anualmente $21.768 en 2018 en relación a cuando Cambiemos asumió en el Gobierno. Las proyecciones a 2019 no son para nada alentadoras, ya que pronostican una solidificación de la crisis, llegando a perder 21% en el promedio de los primeros cinco meses de 2019 respecto del promedio de 2015. “En relación del Salario Mínimo Vital y Móvil, en promedio, la pérdida de poder adquisitivo en diciembre de 2018 respecto del promedio de 2014/2015 alcanza un 24%, es decir, algo más que $2.700 mensuales, considerando el SMVM de $11.300 en diciembre de 2018”, indica el informe del CEPA.

Pasado a dólares, “el valor cayó por debajo de los niveles de 2001”, ya que en septiembre de aquel año, “el SMVM  se ubicaba en torno a los 259 dólares” y hoy, en 2018, “no alcanza los 251 dólares”. En síntesis, “el SMVM medido en dólares se encuentra en su punto más bajo desde los últimos doce años”.

 

Por otra parte, se relevaron los crecimientosdel empleo y los salarios. “El poder adquisitivo de la Remuneración Normal y Permanente Desestacionalizada, considerando la evolución del IPC-INDEC y el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM, BCRA), se retrajo 21,5% en la comparación entre el promedio del poder adquisitivo promedio de 2015 y el medido en diciembre de 2018, es decir, unos $7.046 mensuales, considerando la remuneración normal y permanente de $32.776 en diciembre de 2018”, sentencia el estudio, de proyecciones absolutamente desalentadoras para la economía interna y de consumo de la masa trabajadora.

En 2015, la tasa de desempleo alcanzaba los 6,6 puntos porcentuales y así se mantuvo desde 2003. Bien, en el segundo trimestre de 2018, la desocupación fue del 9,6 y representan 387.000 nuevas personas fuera del sistema laboral. “En la región GBA (Capital y partidos del GBA) la tasa de desocupación en jóvenes ascendió a 23,2%. Tomando como comparación el segundo trimestre de 2015, el incremento en la desocupación de los jóvenes fue de 5,1 pp. entre 2015 y 2018. Durante el mismo período el incremento fue de 8,2 pp. en el GBA”, detalla el CEPA.

Lo mencionado anteriormente deteriora considerablemente el poder adquisitivo de los argentinos, sumado a que en relación a los aumentos de los servicios, los salarios corrieron siempre muy por detrás. “El gas se incrementó a diciembre de 2018 un 3.008%, la electricidad 2.136%, el agua 515%, el transporte 332%, mientras que la remuneración normal y Permanente Desestacionalizada y el SMVM solo aumentaron 113% y 100% respectivamente”, cierra el CEPA, ya con demasiada información negativa.

Fuente: www.sonidogremial.com.ar