Día del Empleado Municipal en Villa María: Poco para festejar

“El 8 de noviembre conmemoramos el Día de lo/as Empleado/as Municipales y lo primero que hacemos desde la Unión de Trabajadores de Estados Municipales (UTEM-CTAA) es abrazarnos a las compañeras y los compañeros que trabajamos en los municipios”, dijo a esta agencia Jesús Chirino, Secretario General del gremio y miembro de la Comisión Ejecutiva Regional de la CTA Autónoma Villa María.
“Pero también debemos decir que más allá de la alegría que sentimos por ser municipales no podemos perder de vista la durísima situación que vivimos quienes trabajamos en la Municipalidad de Villa María. A pesar de los anuncios pomposos, la verdad es que los índices de precarización laboral siguen en niveles escandalosos que para nada han sido revertidos en estos últimos años”, subrayó.
Chirino agregó: “Reconocemos algunos pases a planta, pero a todas luces no es suficiente.Hoy por hoy la mayoría del plantel de trabajadore/as municipales están bajo una relación laboral precaria. Pero también sufrimos reducidos sueldos que, en algunos casos, no llegan a superar los ingresos necesarios para salir de una situación de indigencia”.
A la hora de ejemplificar, el dirigente municipal aseguró que “tenemos a empleado/as “facturantes” que cobran $ 8200 mensuales, pues facturan $10.000 pero deben pagar $1.800 de monotributo. Pero no nos va mejor a contratado/as o de planta permanente. En el caso de contratos lo hay de $12.500 mensuales, en tanto que el básico de un empleado de planta permanente, categoría 13, es de $12,858. Quienes revisten en categorías más bajas cobran sueldos menores y debe recordarse que en el caso de contratados no se les abona ni un peso por antigüedad. Todo esto en un contexto en el cual la canasta básica de una familia está fijada en $24.000, en tanto que se considera necesario ganar $14.575 para no ser considerado indigente”.
En pocas palabras el municipio de Villa María está pagando sueldo de indigencia. Una realidad que no se explica sino por la falta de sensibilidad social de quienes están al frente de la Municipalidad en una ciudad pujante donde se pagan tasas municipales carísimas. Pero si resulta injustificable este tipo de situación, de relación laboral precaria y sueldos tan bajos, también no puede tolerarse comportamientos reñidos con la cultura democrática como los desarrollados por un secretario del Poder Ejecutivo que en una reunión manifestó, a empleado/as, que quienes no estuvieran con el proyecto político gobernante tenían la puerta para irse”, señaló Chirino.
El titular de UTEM-CTAA afirmó: “Debemos aclararle que más allá de las opiniones políticas de cada cual, todo/as somos empleados del Estado municipal y no de un proyecto polìtico en particular. El mismo personaje, en otra reunión realizada en el Salón Blanco, apretó nuevamente a empleado/as diciendo que no se puede informar nada de lo que pase en la repartición pública. Una suerte de posición mafiosa: alguien con jerarquía que, aprovechándose de la vulnerabilidad de quienes tienen una relación laboral precaria, prohíbe que se difunda si algo se hace mal en una repartición pública. Es una triste, y violenta, manera de ejercer la función que le confió el intendente. Ya estamos golpeados por la crisis económica que vive el país, no necesitamos compadritos ejerciendo el poder como si fueran esclavistas del siglo XIX”.
“Pero lo/as municipales continuamos levantando la voz y señalando que queremos dignidad en las relaciones laborales, nuestro sueldo y las condiciones de trabajo. Para ello necesitamos pase a planta de todo el personal y una urgente recomposición salarial pues el municipio acordó, con el gremio oficialista, un aumento del 25% para todo 2018, pero la inflación de Córdoba, para septiembre, llegó al 28%, es decir que ya estamos perdiendo (y eso que aún falta cobrar parte de ese 25%). Es decir que no sólo tenemos sueldo muy bajos sino que la intendencia de Martín Gill se propone que los salarios municipales pierdan por goleada ante la inflación, igual que hizo el año pasado”.
“Así se produce el ajuste a nivel local, con sueldos bajos, precarización y despidos como los que produjeron en las últimas semanas. Seguro que el 8 el oficialismo, tanto político como gremial, se llenarán la boca con supuestos reconocimientos a lo/as empleado/as municipales, pero serán sólo palabras y gestos vacíos que deberían estar plenos de reconocimiento real que venga con sueldos y relaciones laborales dignas”, remató Chirino.