La jubilación mínima ya está debajo de la línea de indigencia

El haber mínimo de la ANSES es de $ 11.528,44 en junio, por debajo de la Canasta Alimentaria de mayo elaborada por INDEC. El aumento de la línea de indigencia fue de 61,7 % en los últimos doce meses, en contraste con el 25 % que subió el salario mínimo.

En mayo, un hogar necesitó $ 30.337,84 para no ser pobre y $ 12.086,78 para no ser indigente, de acuerdo a las canastas básicas elaboradas por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

Con estos valores, el haber mínimo que otorga la ANSES queda por debajo de la línea de indigencia.

La jubilación mínima era en mayo de $ 10.410,37 y en junio se elevó por movilidad previsional a $ 11.528,44. Ambos valores por debajo de la línea de indigencia de $ 12.086,78 en el mes de mayo.

De esta manera, una jubilada o jubilado que percibe la mínima requiere más de dos jubilaciones y media para alcanzar la línea de pobreza.

En el último año la canasta básica aumentó 61,1 %, por encima del nivel general de precios (IPC) (igualmente elevado) de 57,3 % anual en mayo. De esta forma, se sigue deteriorando el nivel de ingresos de los asalariados y los sectores populares.

Así también, en los últimos doce meses la canasta alimentaria (que define el nivel de indigencia) acumuló un alza del 61,7 %, en contraste con el 25 % que subió el salario mínimo.

El Salario Mínimo se ubica actualmente en $ 12.500, apenas por encima de la línea de indigencia, y se encuentra congelado desde marzo, sin novedades sobre una nueva convocatoria paritaria.

La Canasta Básica Total (CBT) para una familia tipo, que define el nivel de pobreza, subió 2,9 % en mayo. Producto de esto, una familia tipo necesitó $ 30.337,84 para no ser pobre. La cifra implica que hay que tener como ingresos dos Salarios Mínimos y medio para superar ese umbral.

Fuente: www.laizquierdadiario.com