La labor sindical en tiempos de crisis

Los tiempos que transcurren son duros, nebulosos y nos enfrentan a una cruda realidad colmada de crisis en diferentes aspectos. En ese sentido, los sindicatos se convierten en la última trinchera de lucha y de encuentro. ¿Cómo transitan este camino de arduo trabajo gremial?, en ese entramado nos adentramos.

Por Florencia Guttlein*

Dialogamos con Jesús Chirino, Secretario Gremial de la CTA Autónoma Regional Villa María y Secretario General de la Unión de Trabajadores de Estados Municipales (UTEM-CTA), quien nos comentó sobre el trabajo que vienen realizando desde el gremio, los debates y encuentros realizados y la realidad de los trabajadores municipales de Villa María.

-¿Cuál es la situación actual del gremio en la CTA?

-La realidad es compleja y donde no solo están los problemas tan importantes como el desempleo, los bajos salarios, la inflación, la precarización, entre otros. También existe un claro ataque a lo que conocemos como la sociedad salarial y una intensa actividad direccionada a borrar cualquier identidad de nuestra clase. Y estas son cuestiones centrales que debemos tener en claro para discutir qué instrumentos políticos gremiales necesitamos para dar la pelea de la mejor manera, o cómo actualizamos las herramientas que actualmente tenemos. En esa urgencia por allí pareciera confundirse la actividad de la Central con la que debemos hacer desde los sindicatos de base.

-¿Qué consecuencias trae esto?

-Existen señales que las morosidades en estas discusiones dañan la práctica sindical que se desarrolla desde una Central. Como todo daño, lesión o funcionamiento anómalo, produce síntomas que nos hablan de por dónde va la cosa. Entonces preocupan algunos personalismos, vedetismos que vacían la práctica sindical; si ves un flyer promocionando que lo/as trabajadores pasen a ser emprendedores (en la línea del macrismo) y le sumas que el volante está escrito en un lenguaje mercantilista, y cuando querés tomar aire ves que el logo de la Central aparece con un nombre propio, de un individuo, entonces entendés que es un síntoma, al igual que cuando ves compañero/as subidos a los escenarios de campaña política partidaria junto a precarizadores de cuanto trabajador tuvieron a cargo. Esas cosas son síntomas concretos que nos debemos discusiones profundas: O la CTA Autónoma alguna vez dejó de lado la construcción colectiva, la autonomía y la identificación con nuestra clase social o, por el contrario, algunas cosas son malas copias de lo que siempre criticamos y dio razón de ser a esta Central.

Chirino resalta que en Villa María un grupo de organizaciones de base de la CTA-A promovió la discusión sobre lo acontecido pero que la misma fracasó. “Duele aceptarlo, pero es así, existió una definición por candidaturas políticas partidarias que comprometían la autonomía de la Central. No pasó por definiciones individuales a título personal sino al uso de chapa de la Central. Quizás se pueda dar la discusión luego de las elecciones, que todos podamos ser sinceros y decir qué sindicalismo queremos practicar”, resaltó.

-¿Cuál es la situación laboral de los trabajadores municipales?

-Con respecto a la realidad de los empleados municipales de Villa María tenemos que decir que, por un lado, son sueldos muy bajos y con un índice de precarización laboral que expresa el fracaso en el tema de asegurar derechos a los trabajadores que vienen teniendo las últimas administraciones incluida la del Intendente Martín Gill, pero también la de los ex intendentes Eduardo Accastello y  Nora Bedano. Con relación a los sueldos debemos decir que frente a la variación del IPC CBA en 2017 perdimos el 3% , en 2018 el 11 % y toda la inflación de este año pues aún no se abrieron las paritarias.

En el municipio actúa otra entidad gremial, parte de la CGT, que forma parte de la campaña del intendente Gill. Desde esa posición avalan la precarización y la pérdida de poder adquisitivo del salario municipal.