Ellos quieren ganar siempre

Por Juan Carlos Giuliani*

Son patrones de estancia y no conocen de sutilezas. Están a acostumbrados a mandar y a que se les obedezca. Quieren la chancha y los 20. Son los dueños de casi todas las cosas. No les gusta que se los contradiga y, mucho menos, que le toquen sus intereses. Desprecian lo masivo y popular. Viven mirando hacia Europa y Estados Unidos y dándole la espalda a Nuestra América mestiza.

Ellos quieren ganar siempre.

Disponen de un coro de alcahuetes bien pagos que desde las secciones de “periodismo rural” de las páginas de los diarios, los espacios audiovisuales y las redes sociales amplifican hasta el cansancio su discurso hegemónico. Un relato basado en la construcción cultural e ideológica que la oligarquía impuso a sangre y fuego contra el indio, el gaucho y el obrero: “Si le va bien al campo le va bien al país”. El concepto “campo” en sí mismo es una entelequia, porque el “campo” donde se produce la agricultura familiar, donde labran los chacareros y campesinos pobres, o cuidan sus animales familias rurales en economías de subsistencia, no tiene nada que ver con el “campo” de los estancieros, los grandes cabañeros, criadores o los pool de siembra. La “Pampa Húmeda” creció a la sombra de esa doctrina que ensalza la “Campaña del Desierto”, coloca en el bronce a Roca, aplaude a los líderes unitarios, deshonra a los caudillos federales, desprecia a la chusma de gauchos que los seguían, manifiesta desdén por Irigoyen, denosta al peronismo, reivindica la dictadura genocida y acompaña hasta la puerta del cementerio al reciente Gobierno de Cambiemos.

Ellos quieren ganar siempre.

“Nos veremos en las rutas” dijeron, amenazantes, desde Confederaciones Rurales Argentinas, la entidad que se pintó la cara de amarillo para hacer punta en el lock out que la Mesa de Enlace realizará la semana que viene so pretexto de protestar por el aumento de 3 puntos en las retenciones destinadas a 14.484 productores de soja de más de mil toneladas, frente a 40.406 productores de menor escala, a quienes se suman los de otros cultivos y economías regionales, que tendrán disminuciones de hasta el 50 por ciento.

Ellos quieren ganar siempre.

Fogoneados por los mismos que el año pasado fueron eyectados del Gobierno en primera vuelta y ahora conforman la oposición reaccionaria, imaginan un revival con tonalidad épica de lo que fue el conflicto de la 125 en el 2008 y que terminó como terminó con el “voto no positivo” pronunciado en el Senado por el Vicepresidente de Cristina Kirchner. Como de toda experiencia política se sacan -para bien o para mal- conclusiones, esta vez el Frente de Todos tomó los recaudos necesarios para segmentar las retenciones, con lo cual no volvió a pisar el palito de meter a todos en el mismo brete y eludió con inteligencia tratar de igual manera a un pequeño chacarero que a un poderoso estanciero. Los 14.484 grandes productores de soja representan el 26 por ciento del total del complejo sojero pero comercializan el 76 por ciento de la soja producida en el país. A propósito, la exportación de productos oleaginosos y sus derivados alcanzó en 2019 la astronómica cifra de 13.956 millones de dólares. El dinero no es un bien escaso para estos sectores.

Ellos quieren ganar siempre.

Frente a esta nueva embestida de las minorías del privilegio es menester promover la movilización popular, no abandonar las calles y fortalecer una correlación de fuerzas favorable que posibilite expresar el apoyo al Gobierno en aquellas medidas que van en la dirección correcta para devolver derechos y asegurar el bienestar de la gente y criticar cuando encara hacia lugares donde no se debe ir. En este caso, el silencio no es salud. Y la desmovilización mucho menos. Hay que intervenir en el debate y la acción confrontando con el oportunismo político de la legión de aplaudidores acríticos que terminan haciendo el juego a una oposición retrógrada, que sueña con reponer el revanchismo oligárquico.

No dejemos que sigan ganando siempre a costa del hambre y el sufrimiento de nuestro pueblo.

*Vocal de la Comisión Ejecutiva Regional de la CTA Autónoma Río Cuarto. Congresal Nacional de la CTA-A en representación de la provincia de Córdoba

Ilustración: Jericles