Pasaron cosas, potencial analítico y transformación de la realidad

“Pasaron cosas” es un libro editado por la Facultad de Ciencias Sociales de la UNC y la Editorial Brujas. La particularidad: En su portada lleva la imagen de un operario de la Fábrica Militar Río Tercero. Fue en agosto de 2018, cuando se producían más despidos en la industria. La fotografía corresponde a Mickaela Hubeli, Secretaria de Género e Igualdad de Oportunidades de la CTA Autónoma Regional Río Tercero.

El martes 13 de agosto se presentó en Sociales el libro Pasaron cosas. Política y políticas públicas en el gobierno de Cambiemos editado por la Facultad y la Editorial Brujas. En una sala colmada por docentes, estudiantes y público en general, la presentación estuvo a cargo de Eduardo Rinesi, Ilda Bustos y Dante Leguizamón.

En el inicio de la actividad, Soledad Segura, editora del libro junto a Marcelo Nazareno y Guillermo Vázquez, historizó el camino recorrido desde la idea de editar el libro hasta su publicación, destacando que fue parte de un proceso de la facultad que a travesó tambièn dicha producción, desde el proceso de normalización de la faculta, las elecciones directas de autoridades y la lucha por la universidad pública. Esta publicación es “nuestro modo de mostrar el potencial analítico de la facultad; de dar una respuesta a para qué sirven las ciencias sociales”, expresó. Marcelo Nazareno hizo hincapié en que es un libro que desde sus inicios fue pensado en la necesidad de “escribir desde el contexto”, y agradeció a las y los 32 docentes que son parte del mismo. Guillermo Vázquez remarcó particularmente la participación de los y las estudiantes a través del diálogo permanente en las aulas que permitieron pensar inquietudes, necesidades y respuestas a las diferentes problemáticas y análisis que plantea la publicación.

La decana María Inés Peralta destacó la importancia que en la facultad se propicien espacios para la discusión política, remarcando que este libro fue pensado y producido no sólo a fines académicos sino con la intención de generar precisamente un debate político. Asimismo, da cuenta de un momento institucional característico de nuestra facultad al poner en común y recuperar los saberes de las tres instituciones preexistentes y de las tres carreras de grado. “Es una herramienta de construcción de la institución que queremos”, finalizó.

Eduardo Rinesi, docente e investigador y ex rector de la UNGS, hizo un repaso por varios artículos que componen el libro y propuso que debemos pensar críticamente las categorías con las cuales trabajamos: “Los científicos sociales nos la pasamos mirando el mundo, pero a veces lo hacemos distorsionadamente. Cuando el mundo nos sorprende – como ocurrió el domingo pasado en las elecciones o como ocurrió en 2015, porque uno de los sentimientos que teníamos era de derrota pero también de sorpresa- es cuando estamos en condiciones y estamos obligados a revisar esas categorías”. Continuó diciendo que “Pasaron Cosas” revisa y propone las propias categorías: “piensa un ciclo político, no sólo el macrismo, y ayuda a pensar toda la experiencia política de Argentina”.

Dante Leguizamón, periodista de los SRT,  comenzó su exposición citado a Boaventura de Sousa Santos: La contingencia de nuestra vida y de nuestra sociedad está dominada por dos emociones: el miedo y la esperanza. Sepan ustedes que esta violencia desatada se dirige a su resignación, dominados por el miedo y, sobre todo, por el miedo de la esperanza. En ese sentido, propuso que uno de los mecanismos de la gestión macrista es proponer y fomentar una sociedad apagada, que “haga la plancha”, desesperanzada. También, hizo un repaso sobre las políticas de este período y cómo impactaron sobre la comunicación, los medios y los y las periodistas. Finalizó remarcando que este libro, precisamente, con todos los riesgos que implica, fue producido y publicado no desde un lugar academicista sino entendiendo lo urgente de la necesidad de contar con estos diagnósticos.

Ilda Bustos, secretaria adjunta de la CGT Regional Córdoba e integrante de la Intersindical de Mujeres, hizo foco en que el libro permite ponerle palabras a un proceso político y a desmontar la identificación con el actual gobierno: “ayuda a desmontar la idea que quienes nos gobiernan son unos sujetos perversos, malos; a desmontar quiénes son los sectores que están detrás de esto “. Hizo referencia al desmantelamiento y vaciamiento en relación a políticas públicas en materia de educación, salud, comunicación y trabajo; lo que produjo una gradualidad en la pérdida de derechos que termina siempre en algún tipo de exclusión: “La definición que ellos llevaron adelante es que los derechos sean considerados como privilegios”. Para finalizar, propuso reconstruir una mirada distinta que cuestiones por qué se naturaliza esta pérdida de derechos, y que repiense los modelos productivos y de desarrollo de este país.

Al finalizar, se sucedieron preguntas e intercambios entre los y las presentes, opiniones y valoraciones sobre las diferentes lecturas y análisis que el libro permite.

Fotógrafa y protagonista

“Y acá estamos los dos, fotógrafa y protagonista. Después de haber resistido 4 años de atropellos a lxs trabajadores del Estado”, posteó Micka Hubeli, dirigente de la CTA-A Río Tercero, por las redes sociales.

“Ahora tenemos la responsabilidad política y ciudadana de volver, mejores. Por más puestos de trabajo y la reincorporación de todxs lxs compañerxs”, remató.

La imagen, captada por la fotógrafa Micka Hubeli, representó un momento de angustia en Río Tercero, especialmente para las familias y conocidos, en el contexto de los despidos de agosto de 2018 en la Fábrica Militar. Fueron 59 en aquella oportunidad. En la industria madre de la ciudad, en el lapso de un año, entre finales de 2017 y el cierre de 2019, totalizaron 100.

En aquella jornada, con la Gendarmería Nacional en el interior de la industria, se vivieron horas de tensión, considerando que se aguardaba que se leyera el listado de quienes perderían su fuente laboral. Finalmente, sucedió en horas de la tarde-noche. Muchas imágenes quedaron de aquel momento.

Una de ellas, fue la de uno de los operarios, apoyado en uno de los enormes eucaliptos, que se encuentran en el predio. Pensativo, con su rostro angustiado, vestido con su ropa de trabajo, mirando hacia el pasto, o a la nada misma, por lo que estaba sucediendo en la planta estatal.

En segundo plano, se puede observar a un efectivo de Gendarmería, fuerza enviada en la mañana de aquella jornada. Quienes trabajaban o aún trabajan en la industria, hombres y mujeres, como única herramienta para enfrentar a los efectivos, en bloque, abrazados, les cantaron el Himno Nacional en sus rostros.

La fotografía se hizo viral. Es que, más que nunca, se podía aplicar a la misma, el viejo refrán: “una imagen, vale más que mil palabras”. Y la imagen, la del trabajador, sin dudas, lo decía o lo dice todo, porque perpetuó ese momento.

Fuente: www.sociales.unc.edu.ar; www.3rionoticias.com.ar