Por Verónica Franco
Representantes de la Asociación Personal de Casas de Familia (APECAF) formaron parte del Primer Plenario de Trabajadores y Trabajadoras Privados y Autogestionados de Córdoba que organizó la CTA Autónoma. La precarización en el trabajo doméstico las llevó a organizarse y hoy están camino a la obtención de la Inscripción Gremial.
Esta Agencia conversó con representantes de la Asociación Personal de Casas de Familia (APECAF), entidad que ha ganado terreno y conquistado derechos junto a las trabajadoras del Gran Río Cuarto y el sur de Córdoba. “Tenemos más de 100 afiliadas, dos de ellos son hombres”, expresó Viviana Pomiglio, coordinadora de la institución que por ahora es una Asociación Civil, mientras se realizan los trámites para convocar proximamente a una Asamblea Constitutiva de una organización sindical de nuevo tipo con el patrocinio de la Central.
Todo comenzó con una convocatoria a través de volantes que pegaban en las paradas de colectivo y hoy se encuentran en camino hacia la constitución legal del gremio. Pomiglio agradeció a la CTA Autónoma por estar “ayudando con la Personería Gremial”.
APECAF trabaja sobre los derechos vulnerados de las mujeres. El acompañamiento que realizan va más allá del asesoramiento laboral. Actúan en en casos de violencia familiar, gestionan trámites jubilatorios y ayuda escolar para los hijos de las afiliadas. “Las empleadas de casas de familia son las más vulneradas de las mujeres trabajadoras”, expresó Pomiglio.
“Logramos que en Río Cuarto el Día de las Empleadas Domésticas no se trabajara y si se trabajaba se pagara”, agregó.
El sector atraviesa problemáticas de índole histórico, vinculadas a las desigualdades de género y la vulneración de clase, pero también actuales, profundizadas por el contexto de crisis. “Hoy estamos viendo mucho el recorte salarial y el recorte de horas. Las hacen ir menos horas porque no les pueden pagar. O que las quieren hacer renunciar para no despedirlas” expresó Sofía Navarro, otra representante de APECAF.
La referente del sector planteó que “la mayoría de las empleadas de casas de familia son sostén de hogar y no concurren por asesoramiento a APECAF por miedo a perder el trabajo”. Navarro dijo que es recurrente que las trabajadoras se acerquen al espacio a pedir ayuda en voz baja: “Vengo a consultar pero que no se entere nadie de que vine, tengo miedo de quedarme sin nada”, ejemplificó.
“Buscamos que sea un espacio integral más allá de lo laboral porque es un sector muy dejado de lado, esta bueno que se sientan parte”, agregó.
Actualmente APECAF está realizando los trámites para constituirse como sindicato con el respaldo de la CTA-A Provincial y de la Secretaría Gremial y el Departamento Jurídico de la Central a nivel nacional, donde existen varias organizaciones sindicales del ramo.
Tal el caso del Sindicato de Personal de Servicio Doméstico de Río Negro y Neuquén (SiPeSeDo); Sindicato de Empleadas de Casas de Familia (SINDECAF) de San Juan; Sindicato de Empleadas en Casas de Familia de Entre Ríos (SECAFER); Sindicato de Empleadas de Casas de Familia (SINDECAF) de San Nicolás, provincia de Buenos Aires, entre otras. Algunas de ellas con participación en la Comisión Nacional Permanente de Trabajadoras de Casas Particulares y Empleo Doméstico de la Secretaría de Trabajo de la Nación.