Sin respuestas tras dos meses de reclamos de ATE por el cierre del Equipo de Salud Mental de Villa Libertador

La prepotencia de los funcionarios bloquea hasta el momento el reclamo de las y los trabajadores, incluso por la vía administrativa, y expresa el histórico destrato del Ministerio de Salud con los Equipos de Salud de la provincia.

Pasaron dos meses ya de la violenta resolución por la que la Directora de Salud Mental, Pía Guidetti, desarticuló el equipo de Atención Comunitaria en Salud Mental de Villa El Libertador, trasladando compulsivamente a sus integrantes a distintos sectores y  cerrando la sede dónde funcionaba un espacio de  salud que lleva  35 años en el Barrio.

Amparados en la cuarentena, los funcionarios del Ministerio de Salud dejaron sin atención psicológica, en plena pandemia con encierro y en un sector de la ciudad visiblemente castigado por la falta de trabajo y de infraestructuras básicas de la ciudad, a una población de aproximadamente 100.000 habitantes.

Tal como describen las y los trabajadores “nos encontramos hoy sin ninguna respuesta a las profesionales ni a la comunidad sobre las razones de esta medida tomada en plena pandemia”.

La arbitraria resolución  fue rechazada  por las y los vecinos, que manifestaron su preocupación a través de la intervención de la sede del equipo de salud con carteles y distintas expresiones a través de las redes sociales.

Afiliada de ATE

Algunas y algunos se sumaron con su firma a la nota de reclamo elaborada por profesionales e instituciones de la zona, que contó con más de cuatrocientas adhesiones y fue elevada a las autoridades.

La respuesta a estas acciones fue una alarmante sordera. La licenciada Guidetti desestimó un recurso formal para anular la medida y, por si fuera poco, no dio entrada al recurso jerárquico que debe elevar al Ministro de Salud, presentado hace un mes. Este trámite parece estar en el éter, obstaculizando el derecho de pobladores y profesionales a obtener una respuesta de dicha autoridad.

Las explicaciones dadas por la funcionaria a un medio local, sobre supuestas refacciones y ampliación de servicios no parecen ser las reales razones, toda vez que el inmueble sigue cerrado sin que se observe ningún inicio de obra.

Nos preguntamos, ¿Por qué en plena pandemia el día 2 de abril se cerró un servicio de salud mental compulsivamente? ¿Qué razones ocultas hay para arrasar derechos de trabajadoras y trabajadores, vecinas y vecinos?

Afiliadas de ATE consideraron que parece una gran paradoja que la funcionaria Guidetti, proveniente de una disciplina cuyo instrumento central es la escucha, continúe  haciendo oídos sordos a los reclamos de pobladores, trabajadoras, trabajadores e instituciones zonales.

Fuente: www.atecordoba.org