Taller sobre Violencia Institucional: “La lucha es colectiva y popular”

Se realizó el sábado por la mañana en la sede de la CTA Autónoma Regional Río Cuarto una Charla-Taller sobre Violencia Institucional “Mecanismos represivos de las Fuerzas de Seguridad” de la que participó una buena cantidad de compañeras y compañeros que militan fundamentalmente en el territorio.

El Taller contó con la presencia de Rosa Arias, mamá del Alejandro Flores, niño de cinco años desaparecido en el año 1991 en la ciudad de Río Cuarto; Viviana Alegre, madre de Facundo Rivera Alegre, joven desaparecido por la policía de Córdoba en el año 2012 a la salida de un baile de cuarteto; y Cecilia Maurutto, docente de sociología en la Universidad Nacional de Río Cuarto. La abogada Denise Dellamea se encargó de moderar.

La actividad fue organizada por la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA Autónoma) Regional Río Cuarto; Secretaría de Formación y Derechos Humanos de la CTA-A; Federación Nacional Territorial (FeNaT-CTA); Movimiento de Acción Popular (MAP-CTA); Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas (IPyPP).

Luego de la exposición de las panelistas, se conformaron comisiones de trabajo que luego hicieron una puesta en común acerca de las conclusiones a las que arribaron.

“Ante la constante criminalización por parte de los medios y las Fuerzas de Seguridad controladas por los gobiernos de turno para la represión de los sectores populares, nosotros creemos y apostamos a la formación colectiva para seguir construyéndonos como sujetos políticos históricos de lo que nos rodea en el territorio y en los espacios de militancia”, señalaron los organizadores.

“Yo como mamá de Ale quiero saber qué pasó” exclamó Rosa Arias ante los presentes en la sala. Por su parte, Viviana Alegre reafirmó que “el responsable político de la muerte de su hijo fue Juan Manuel De la Sota”.
“Esto no es solo por Facu, es por todos los pibes a los que se les vulneran sus derechos” afirmó Viviana. “Seguridad es incluir a los pibes, no más policías” sostuvo.

Cecilia, docente en la UNRC, remarcó la existencia de mecanismos perversos del Estado y de la clase dominante “que permiten que pasen estas cosas”. ” ¿Qué nos hace convertirnos en ese otro? Ese otro que porque es pobre, es choro, que porque no consigue trabajo, es vago” invitó a reflexionar Maurutto.

El taller concluyó con actividades de a grupos. Se reflexionó sobre el rol de la policía, sobre qué implica el concepto “seguridad” y se llegó a la conclusión de que es necesario un taller que brinde herramientas sobre cómo actuar ante las detenciones policiales de adolescentes en los barrios más periféricos de la ciudad.

Luego del Taller, Viviana Alegre, acompañada por dirigentes del MAP y la CTA-A, visitó la Huerta Comunitaria “Ernesto Che Guevara” de barrio Valacco y el Merendero “Rincón de Luz” de barrio Alberdi.

Documento de iniciación de la Charla-Taller: “No queremos las sobras de nadie”

“Las instituciones policiales fueron creadas históricamente para la seguridad y control social de la población. Seguridad y control que es implementada por cada gobierno para la libre represión de los sectores populares. Sectores que en muchos casos no cuentan con los servicios básicos, cómo tierra, techo, trabajo, educación y salud.

“El control social implementado por las Fuerzas de Seguridad no sólo genera represión si no que también asesina y desaparece personas. Cómo el caso de Ale Flores, Facundo Rivera Alegre, Yamila Cuello, Luciano Arruga, Santiago Maldonado, Rafael Nahuel, los pibes masacrados en Monte, Andreas García Campo, Nicolás Vázquez, Juan José Silva, Silvia Maldonado y muchísimos nombres más que son marcados y volteados con total impunidad.

“Según la CORREPI  un total de 1.303 personas fueron asesinadas por el aparato represivo estatal durante la gestión de Cambiemos, entre el 10 de diciembre de 2015 y el 12 de febrero de 2019. Cada 21 horas el Estado asesina a una persona.

“Un Estado que no se hace cargo de la cantidad de pibes y pibas que tienen que comer en comedores porque en sus casas no les alcanza para comer, un Estado que no garantiza una Educación de calidad, un Estado que no se hace cargo de que la Salud de los dispensarios no cuentan ni con gasas y alcohol para curar una herida, un Estado que mira para otro lado cuando todavía hay gente que tiene que caminar cuadras para poder conseguir agua, un Estado que reparte un presupuesto para construcciones de plazas mientras hay casas sin luz y de chapa.

“Y en estás ausencias del Estado que son cada ves más intensas entran poniendo el cuerpo y haciendo su trabajo las compañeras referentes de los merenderos y comedores. Que aparte de ser estigmatizadas, excluidas y precarizadas, mantienen convencidas la presencia de el otro, cómo la compañera María (referente del Centro Comunitario ‘La Barriada’) a quien reivindicamos por su gran lucha y combate diario por el hambre que les hacen padecer.

“La lucha por la libertad de decidir y de transitar libremente en la ciudad es algo que tenemos que llevar a la acción y denunciar los casos de acoso y violencia sucedidas sistemáticamente por la Policía de la ciudad en el sector de El Andino. Llevando en este último mes a 8 pibes detenidos por semana. Llevados a la Comisaría Central y, por relatos escuchados tanto en la Jefatura de Policía como en la dependencia policial del Barrio Alberdi, esos lugares son utilizados nada más que como espacios de tortura para lxs pibxs.

“La disputa se está haciendo cada vez más clara e intensa a la hora de reflejar el tipo de territorio que estamos construyendo. De libertad y verdadera democracia en América latina, dónde en Chile, Ecuador, Haití, Bolivia y Colombia lxs compañerxs están combatiendo intensamente a los gobiernos neoliberales que tratan de apoderarse de lo que nos corresponde.

“Apostamos y construimos entre todos estos espacios de formación y debate para hacerles entender que esta etapa ya es hora de pasarla. Le vamos a hacer entender que la lucha va a ser colectiva y popular, que no queremos la sobras de nadie.

“Por eso exigimos al Gobierno Municipal la regularización de los controles policiales para el libre tránsito de la ciudad y la aplicación urgente de la Ley de Emergencia Alimentaria votada y aprobada por el Congreso de la Nación gracias a la lucha en las calles que dimos las organizaciones sociales, políticas y sindicales en todo el país.

“Por una sociedad más justa y dónde quepamos todos”.

Fotos: Camila Petenatti y Daniel Ramonell