La CTA-A Punilla encabezó una Asamblea para denunciar precarización, pérdida salarial y recortes en el Hospital Domingo Funes

La crisis laboral y sanitaria golpea en el Hospital Domingo Funes, un establecimiento de Salud Pública Provincial ubicado a 50 km de la ciudad de Córdoba, en la localidad de Santa María de Punilla, situada sobre la Ruta Nacional Nº 38.

El 1° de octubre se realizó una Asamblea en el Hospital Domingo Funes, convocada por la CTA Autónoma Punilla, de la que participaron, entre otros, Juan Yacobs, Secretario General de la CTA-A y Juan Pablo Pozzi, Secretario General de ATE Cruz del Eje y Secretario Gremial de la Central. En el encuentro se expusieron con crudeza las condiciones laborales y sanitarias que atraviesa el principal Hospital de referencia de la región.

Uno de los reclamos centrales fue la precarización laboral. Desde hace aproximadamente un año, las bajas por altas no se cumplen y todos los nuevos ingresos se realizan bajo la figura de monotributistas, lo que deja al personal sin estabilidad ni derechos plenos. A esto se suma una pérdida del salario real del 23% en el último año. Según denunciaron, los ingresos resultan muy por debajo de la magnitud de las responsabilidades: una enfermera con 40 horas semanales apenas percibe alrededor de 1.400.000 pesos.

Juan Pablo Pozzi y Juan Yacobs.

El clima de hostigamiento también apareció entre las problemáticas. Trabajadores aseguraron que existe temor a organizarse y que, en muchos casos, son acosados por fuerzas policiales y de seguridad que los fotografían en espacios comunes como el comedor o en reuniones internas.

En cuanto al funcionamiento del Hospital, la situación es igualmente crítica. Se derivan a Córdoba los servicios de ORL junto al desmantelamiento gradual de las áreas de neurología; el servicio de mamografía otorga turnos recién para noviembre —en plena semana de concientización sobre el cáncer de mama—, y el laboratorio carece de insumos, lo que reduce los turnos en consultorio externo y la recepción de muestras de dispensarios y centros de atención primaria del corredor. Tampoco se garantizan estudios esenciales como endoscopias o colonoscopias. Todo por lo cual—, obliga a los pacientes a trasladarse a la Capital Provincial.

En paralelo, la demanda en Neonatología y en el Plan Sumar se duplicó tras el cierre de la sala de partos del Hospital de La Falda.

Otro punto señalado en la Asamblea fue la escasa participación gremial. Según expresaron los presentes, gran parte de los trabajadores se encuentra desencantada con las dirigencias sindicales debido a gestiones sin resultados de la representación mayoritaria a cargo del Sindicato de Empleados Públicos (SEP-CGT), lo que los encuentra sin representación gremial efectiva. Otro camino ha transitado la Seccional de ATE Punilla-Cruz del Eje que de manera incansable se estuvieron movilizando en el Polo Sanitario junto al conjunto de la Salud Pública organizada de Córdoba.