Rodolfo Kempf, Investigador de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y dirigente de la Asociación Trabajadores del Estado, pasó por los estudios de Sobre la Hora, para reflexionar sobre la situación energética en nuestro país.
A partir del boom de la serie Chernobyl de HBO, el científico remarcó que no es posible un evento de esa naturaleza en Argentina por el tipo de diseño del reactor: “no tienen ningún tipo de parecido con las tres centrales que están instaladas en Argentina”, Atucha 1 y Atucha 2 en Lima, Zárate, Buenos Aires; y Embalse en Río Tercero, Córdoba. “Son centrales que tienen primero la contensión de esferas” que es la forma que mejor contiene una diferencia de presión dentro de ellas “que es lo que se ve de hormigón” en todas las Centrales, y otra parte semiesférica que está en el suelo.
“Argentina tuvo casi 70 años con desarrollo nuclear autónomo, con logros singulares en el mundo. Argentina es parte del G20, entró en el G20 con Cristina fundamentalmente porque Argentina maneja una de las energías estratégicas como es la nuclear, el ciclo de combustible completo. Desde las extracción del mineral de uranio, llevarlo a un combustible nuclear hasta el enriquecimiento de uranio que se hace en una planta industrial en Argentina Chica, que es una planta sofisticada muy grande en la Estepa Patagónica en Pilcaniyeu“
El país cuenta con esa planta única en Latinoamérica y lidera el manejo de ese tipo de tecnología. “Este gobierno viene atentando alebosamente y premeditadamente contra una tecnología instalada, un conglomerado industrial” denunció, “porque no solamente están dejando sin becas a científicos, cosa que está en CONICET y CNEA, hay una merma de jóvenes en el ingreso; sino que está tirando por la borda plantas industriales de la mayor calidad del mundo, la mayor pureza de separación de agua pesada“.
El trabajo en las plantas consiste en hacer fisiones, es decir, divisiones en un átomo, “para eso los neutrones tienen que ir a una velocidad determinada”. Allí se utiliza el agua pesada que refrigera el calor liberado en el proceso de fisión: “y eso luego mueve una turbina como cualquier sistema de energía”. “El vapor se genera en una forma nuclear, con mucho menos mineral, mucho menos volumen: es una densidad de energía un millón de veces mayor a igual volumen que un hidrocarburo” explicó.
“El sistema precisa un moderador, algo que le genere la velocidad a los neutrones para que logre dividir los núcleos”, en Argentina se utiliza el sistema de agua pesada que se extrae de los cursos de agua natural, y a los cuáles se le extrae el deuterio, un isótopo del hidrógeno. “Eso se separa en un proceso químico muy costoso, sofisticado, nuestros trabajadores tienen decenas de años de calificación para hacerlo y esa es una de las bases de nuestra tecnología” remarcó.
En esa Planta, el gobierno propuso retiros voluntarios y dice que va a quedar una planta de mantenimiento, aunque Kempf denunció que “han desmantelado toda la planta, es una planta muy grande, y van a quedar un par gendarmes para que no se roben los fierros”. “Eso no es desidia, es una obra premeditada de destrucción de nuestro enclave industrial” afirmó.
“Luego del acuerdo con el Fondo, este gobierno optó por una tecnología que no utiliza agua pesada, y cualquier persona razonable diría, tenemos todas las etapas del proceso, las sabemos hacer, únicos en el mundo, exportamos, por qué no instalamos nuevamente la central aquí, que era el plan de 2015 firmado por Kicillof cuando era Ministro de Economía. Entonces no tiene ningún sentido, ni siquiera el déficit cero lo explica, porque el crédito que dan los chinos era un crédito blando. Lo único que tiene sentido es destruir el enclave industrial, y que seamos un país pastoril”.
Fuente: www.sobrelahora-radio.com.ar