Gladys Medina es trabajadora municipal -Jefa de Despacho del Tribunal Administrativo de Faltas-, dirigente de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE-CTA) y Secretaria Adjunta de la CTA Autónoma Regional San Francisco. Además integra la Comisión Directiva de la Asociación Civil “Proyecto Esperanza”.
A través de esta asociación se trata de alcanzar a los niños, adolescentes y jóvenes en situación de riesgo de los barrios marginales, involucrándolos en actividades deportivas, culturales y de recreación, como ser boxeo, rugby, voley y fútbol, arte (dibujo y pintura) y se lleva adelante a través de donaciones, una copa de leche de lunes a domingos, donde se atienden con la merienda a 50 niños.
“Proyecto Esperanza”, entre otras actividades, dispone de un Merendero en el Barrio Acapulco de la localidad santafecina de Josefina, lindera a San Francisco, que es coordinado por Medina y que funciona desde hace cinco años en el sector. Recibe desde lactantes hasta adolescentes. Si bien absorbía un promedio de entre 30 y 35 chicos, al cerrar otro Merendero el año pasado, el número trepó a 50. Sirven la merienda de lunes a sábado y el miércoles por la noche una cena.
“En lo sindical, estamos abocados junto al compañero Secretario General de la Central, Antonio Muratore, a reflotar la Regional de la CTA-A para que sea una referencia organizativa para el conjunto de los trabajadores ocupados y desocupados, en negro, formales o jubilados de San Francisco y la zona, a la par que seguimos desarrollando tareas de contención en lo social”, apuntó.
Y agregó: “En cuanto a ATE, aunque el Intendente todavía no haya respondido a nuestras solicitudes de entrevista, ya contamos con más de un centenar de trabajadores municipales afiliados al gremio así que esperamos que más temprano que tarde el Municipio deje de operar a favor del unicato del SUOEM y permita ejercer la pluralidad sindical en el Estado, tal como lo ordena la legislación vigente”.
Respecto a la labor de “Proyecto Esperanza”, asociación que se ha sumado a la Federación Nacional Territorial (FeNaT-CTA) en Josefina, dijo que en el barrio “se vive una situación muy conflictiva, muy difícil. La gente está con miedo, los niños alterados, me doy cuenta que es el aire que se respira en el barrio porque los tiros no paran. Este espacio está ubicado sobre Calle 5 al 519”.
Sobre la situación de violencia en el barrio, Medina sostuvo: “No me es fácil ir, mi familia tiene miedo pero es una vocación de servicio la que tengo. El miedo paraliza y los chicos no necesitan eso sino que tienen hambre porque hay una necesidad y hay que dar respuestas. Por eso estoy dispuesta a correr el riesgo”, afirmó, aunque destacó que con la gente del barrio jamás tuvo inconvenientes y aseguró sentirse “respetada”.
“En el mientras tanto, seguiremos trabajando para que ATE y la CTA Autónoma se conviertan en espacios de participación y organización de los trabajadores y de los sectores más humildes de la población que están siendo tan duramente castigados por la crisis económica y social que estamos sufriendo”, remató Medina.