El caso de la facturante despedida de la Municipalidad de Villa María

Por Camilo Rodríguez*

Cuando en el año 1971 empecé a militar en el gremialismo, el 99% de los gremialistas eran peronistas y me enseñaron que los derechos de los trabajadores se respetan, que había que hacerlos cumplir cueste lo que cueste.

Yo nunca oculté mi militancia como radical, en plena dictadura militar fui elegido secretario general de la C.G.T. que, en esa época, abarcaba media provincia: Villa María, Bell Ville y Marcos Juárez; cientos de conflictos luchando contra los milicos a pesar de que no se andaban con chiquitas, muchos militantes desaparecieron.

Hoy me pregunto ¿qué pasó con el lema que la columna vertebral del peronismo era El Movimiento Obrero?

Intendente peronista Martin Gill, cientos de precarizados en su Municipalidad como facturantes y contratados.

Gobernador Schiaretti, peronista, nos bajó el sueldo a los jubilados del 82% al 73% y permite que se violen todos los derechos de los trabajadores.

Leo con asombro en un periódico local, que el Superior Tribunal de Justicia de la Provincia falló que una trabajadora facturante del Municipio debe ser indemnizada por despido.

La Constitución, madre de la ley en nuestra provincia, dice que el empleado público tiene estabilidad, por lo tanto no la pueden despedir sin una causa justa y luego de un sumario administrativo. En el caso que la encuentran culpable la despiden sin abonarle nada.

Si no la pueden despedir me pregunto ¿qué pasó con el famoso lema de Perón?

*Ex Secretario General de la CTA Villa María. Integrante del Centro de Jubilados y Pensionados Municipales de la Provincia de Córdoba, entidad adherida a la CTA Autónoma Provincial