A 60 años del Programa de Huerta Grande: Recuperar la conciencia de clase

“Urgen este tipo de debates, vamos a tener miradas en común, matices de diferencia, pero tenemos que llegar a acuerdos que nos vuelvan a meter en la agenda de los que mandan”, dijo Federico Giuliani, Secretario General de ATE y y la CTA Autónoma Córdoba.

En la oportunidad estuvieron presentes María Ana Mandakovic, “próxima Secretaria Adjunta de la CTA Nacional que expresa la etapa que se viene, tanto en los ámbitos de discusión pero también de definición política con presencia del interior y de las mujeres”, dijo Giuliani; compañeros del Sindicato Quínico  y Petroquímico de Río Tercero; Darío Domínguez, Secretario General del Sindicato de Aceiteros de Tancacha; Jorge Chalup, candidato a Secretario General de la CTA Autónoma en la Regional Capital por la Lista Nº 1 “Germán Abdala” y Marcos Pozzi, Secretario General del Sindicato de Aceiteros de Rosario, entre otros.

Giuliani comenzó la apertura resaltando “la autonomía, porque los dirigentes sindicales se deben a los intereses de la clase trabajadora y no a los patrones de turno o los gobiernos. Nos pueden gustar o no pero nuestra autonomía debe ser uno de los puntos centrales para poder ocupar lugares de conducción”.

“Urgen este tipo de debates, vamos a tener miradas en común, matices de diferencia, pero tenemos que llegar a acuerdos que nos vuelvan a meter en la agenda de los que mandan. Parece que se hubieran olvidado que en Argentina hay hambre, de que los trabajadores laburamos para seguir siendo pobres, que la precarización es la herramienta de disciplinamiento de nuestra clase, de que en el Ministerio de Trabajo de Córdoba no nos atendieron en plena pandemia ni dejaron una ventanilla para meter una nota y que te la reciban”, señaló.

“En ese marco, dijo, la unidad se da de abajo para arriba, si no es en el puerto que sea en las provincias, si no es en el centro que sea en la periferia. Acá en Córdoba se dio una experiencia muy linda el 16 de junio, en el aniversario del bombardeo de Plaza de Mayo, conformando la unidad en la calle con la Unidad Piquetera de Córdoba. Entre sindicatos combativos, el bloque piquetero, las organizaciones ambientalistas nos movilizamos frente al modelo extractivista y que tiene al gobernador Schiaretti como lobbista de los terratenientes a partir de la agenda que le marca el Grupo de Entidades Empresarias de Córdoba (G6) -integrado por la Bolsa de Comercio, la Cámara de Comercio, la Cámara de Comercio Exterior, la Cámara Argentina de la Construcción–Delegación Córdoba, la Federación Comercial y la Unión Industrial- junto a los dueños de casi todas las cosas: Urquía, Pagani y Roggio”.

Y remarcó que “frente a la demanda social, que dice que el hambre es un crimen, trabajo genuino en los barrios populares, ahora en debate a partir de lo que dijo Cristina Fernández de Kirchner, que quiso decir una cosa y le salió para otro lado, al punto que hoy Desarrollo Social comenzó una caza de brujas con nuestra compañeras y compañeros que tienen el Potenciar Trabajo y que con esos 18 mil pesos mensuales sostienen los comedores populares en el territorio”.

“Si no hubiera sido por las organizaciones populares y piqueteras, la crisis hubiera sido tres veces más a la actual. Porque fueron el dique de contención y brindando amor en esos espacios”, afirmó Giuliani, para luego anticipar que “éramos miles, el desafío continúa y vamos a empezar a plantear un Plan de Lucha contra Schiaretti y Llaryora”.

Por su parte, Daniel Yofra afirmó que “estamos en una situación totalmente distinta a la década del 60, diferente a la de aquellas épocas. No podemos dejar de comparar donde tuvimos una generación de dirigentes muy buena y los militares en el ’76 nos sacaron.Hoy somos pocos los dirigentes que hablamos del Salario Mínimo Vital y Móvil cuando se tata de cumplir con la Ley de Contrato de Trabajo”.

“Tampoco podemos dejar de hablar de la Gestapo Sindical del PRO y nos cuesta hacer la autocrítica en el Partido Justicialista que hubo una Triple A que entregó a los dirigentes sindicales combativos, junto con las patronales, para que los militares supieran a quien tenían que agarrar, desaparecer o meter preso, sacarlos del sistema para que no prolifere y no deje una herencia”, recordó en otro tramo.

Para luego avanzar diciendo que a pesar de eso “la semilla está, seguimos estando, tenemos una visión. Hoy estos programas se podrían discutir tranquilamente pero no podemos dejar de pensar que tenemos 52% de pobres y que es absurdo que esos trabajadores sean pobres teniendo trabajo”.

Y destacó que “herramientas como estos encuentros nos permiten a los dirigentes poder enfrentar a los partidos políticos y los patrones que son responsables de la crisis que tiene este país y que los trabajadores vienen pagando hace mucho tiempo”.

“Si no somos capaces de ver que tenemos la huelga para enfrentar a las patronales va a ser difícil que triunfemos con cualquier programa, en cualquier frente o solidaridad. No existe nada que podamos reivindicar como trabajadores si no pensamos en la huelga”, agregó.

Por su parte, Ilda Bustos destacó que “el Programa de Huerta Grande es un decálogo que debemos tomar a donde tenemos que volver, pero el problema está en la representación y en recuperar la conciencia de clase”.

Y lamentó en otro párrafo que “las empresas han obligado a los trabajadores a ir al Ministerio de Trabajo a apoyarla, eso paso hace unos días en Córdoba. Y el grado de humillación que sometieron a esos trabajadores es muy grande. Esa situación debe revertirse con la unidad, la conciencia de clase y la acción gremial decidida”.

La charla completa puede verse a ingresando aquí

Fuente: www.atecordoba.org