La histórica AMMAR Córdoba se reincorporó a la CTA Autónoma

En una emotiva Asamblea realizada este martes por la tarde con las compañeras en la Sede de AMMAR, Maipú 630 de Córdoba Capital, se decidió por unanimidad el retorno de esa organización a la CTA Autónoma de la provincia de Córdoba.

“De vuelta en casa con una felicidad que nos desborda”, posteó por las redes sociales Federico Giuliani, Secretario General de la CTA-A, quien añadió: “Nos gratifica que las compañeras vuelvan a comprometerse con este proyecto colectivo y que lo hagan a partir de su propia identidad, sumando militancia genuina en el seno de la Central”.

Junto a Giuliani participaron de la Asamblea Silvia Alcoba, Secretaria General de la CTA-A Regional Río Cuarto y Coordinadora Provincial de la Federación Nacional Territorial (FeNaT-CTA); Susana Ríos, referente de la Federación en la ciudad de Córdoba; Fermín Boloquy de Juventudes de la CTA-A provincial y Daniel Yedro de Juventudes de la CTA Autónoma Capital.

Giuliani afirmó que “estamos contentos de volver a tejer redes y articular actividades, algunas de ellas en los barrios donde AMMAR tiene presencia. La decisión de reingresar al quehacer diario de la CTA ha sido unánime y, en consecuencia, nosotros pondremos todo lo que haya que poner para colaborar en el crecimiento de una entidad que es señera en la historia de nuestra Central. Celebramos la reincorporación del Sindicato de Mujeres Trabajadoras Sexuales a nuestra CTA Autónoma”.

Patricia Figueroa, Secretaria General de AMMAR Córdoba, expresó su satisfacción por “regresar a la casa en donde nosotras hemos nacido. Todas las dificultades que pasamos las hemos superado en gran medida gracias al apoyo que nos brindó la CTA”.

Señaló que tras una linda charla decidieron volver a la CTA-A donde históricamente han crecido: “Queremos seguir estando en la CTA, con Federico Giuliani, para seguir en la lucha y que no haya más niños en la calle con hambre, que tengan derecho a la salud, la vivienda, la tierra y al trabajo”, expresó la dirigente.
“Somos mujeres de barrio, trabajadoras sexuales, llevamos 20 años pulseando por una mejor calidad de vida para nuestro sector, en salud, en educación, atención y contención de todo tipo. En esta pandemia estamos pidiendo solidaridad para ayudar a sostenernos ya que nos encontramos con pocos recursos. Este segundo año pandémico hizo aún más precaria la vida de cientos de trabajadoras sexuales y por eso necesitamos de la ayuda comunitaria”, comentó finalmente Figueroa.
Silvia Alcoba expresó con mucha felicidad que “el retorno de las compañeras a la Central es un avance más para construir una organización con capacidad para transformar esta realidad tan injusta”.