Autopsia del modelo

Las consecuencias del mandato macrista sobre el cuerpo social se pueden evaluar en cada área de gestión. La sociedad argentina acusó recibo de cada medida gubernamental y cuatro años después, ya no es la misma. Cómo será la pesada herencia que le deja Cambiemos al próximo gobierno.

De cara a unas elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias que funcionarán casi como un plebiscito de la gestión de Mauricio Macri al frente del país, la gran discusión por estos días es si será o no la economía (estúpido) la gran inclinadora de balanzas entre los electores.

Y es que si el voto se decidiese sólo en función de la buena o mala marcha económica, Juntos por el Cambio no tendría chance.

Como último y más moderno exponente de un modelo que disputó la conducción de la Argentina desde el principio de los tiempos, su gestión de gobierno terminará con tan poco para mostrar que el Presidente tuvo que recurrir al recuerdo de una obra de su primer mandato frente al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires –el entubamiento del Arroyo Maldonado, que había gestionado Aníbal Ibarra- para poder hablar de un éxito en el cierre de la campaña porteña.

Si diseccionáramos las consecuencias del modelo sobre el cuerpo social como si se tratase de un organismo vivo, el diagnóstico sería una enfermedad grave, con vistas a empeorar.

Uno a uno, los datos de la gestión macrista en la víspera de su primer encuentro con las urnas que convalidarán, o no, su intento reeleccionario.

  • Inflación: 2018 cerró con aumentos de 47,6%, los más altos desde 1991. En 2019, la inflación -que en 2015 Mauricio Macri recibió en 27%- llegó al 55,8% en junio (último dato disponible), en relación con el mismo mes del año anterior. El acumulado del primer semestre sumó 22,4%.

Los grandes motores de los aumentos fueron las tarifas de los servicios públicos, que en algunos casos llegaron a 3700%. En tanto, los rubros sensibles como alimentos y medicamentos, acumulan una inflación desde comienzos de 2016 que llega al 350%. Este año, la inflación amenaza con batir un nuevo récord.

  • Deuda: En mayo de 2018, la Argentina volvió a financiarse con recursos del Fondo Monetario Internacional con un acuerdo por US$50.000 millones, 12 años después del cancelamiento de la deuda con este organismo.

El espiral de endeudamiento llevó la relación de la deuda con el PBI argentino al 97,7%. El nuestro se convirtió así en el país más endeudado de la región, según datos de la CEPAL. En 2015, el porcentaje era del 53,3%.

Al final del primer trimestre de 2019, según datos del Ministerio de Hacienda, la deuda argentina ascendía a US$324.898 millones, casi US$90.000 millones más que en 2015. En tanto, los capitales argentinos que se fugaron en la era Macri rondan los US$60.000 millones, más que la deuda contraída con el Fondo. Al cambio actual, la deuda argentina –que no incluye el último desembolso del FMI de US$5.500 millones- equivale a casi $15 billones.

  • Pobreza: De acuerdo con los números de la Universidad Católica Argentina, el 2015 la pobreza rondaba el 30% y la indigencia el 4,5%. Según el último informe del Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas, en los primeros tres meses de 2019 la pobreza llegó a afectar al 34,1% de la población (15,3 millones de personas). Los últimos datos del Indec disponibles son de diciembre de 2018. Por entonces, el índice de pobreza ya alcanzaba al 32% de la población (8.926.592 personas), y el de indigencia al 6,7% (1.865.867 personas). Es decir que aumentaron 4,7% y 1,8%, respectivamente, en relación al semestre anterior. 
  • Desempleo: En los cuatro años de gobierno macrista, la desocupación volvió a las dos cifras. Según el INDEC, alcanza al 10,1% de los argentinos, es decir que hay 1.961.840 desocupados. “Esto afecta, particularmente, a los trabajadores y trabajadoras de la industria manufacturera. En tres años, más de 100.000 trabajadores perdieron su puesto en esta rama. Es algo que no se veía desde la salida del régimen de convertibilidad en 2001/2002”, sostuvo Luis Campos, del Observatorio de Derecho Social de la CTA Autónoma. Si tomamos en cuenta los “ocupados demandantes”, la tasa sube en un año de 15,3% a 17,5% es decir que hay una desocupación encubierta de 477.695 personas más. Por otro lado, durante todo el período de Macri de cada diez puestos de trabajo generados, cinco son cuentapropistas y cuatro trabajadores clandestinos o no registrados.
  • Despidos: Las suspensiones, retiros voluntarios y las cesantías afectaron con la misma dureza al sector privado como al público. Por cierres o por reducción empresarial las personas que fueron expulsadas de sus empleos se cuentan de a miles. En el ámbito estatal, se calculan que son 35 mil los trabajadores y trabajadoras despedidos por el macrismo. De hecho, el gremio ATE creó una comisión para motorizar el pedido de reinstalación de los trabajadores que fueron expulsados del Estado en la gestión Cambiemos.
  • Sistema previsional: El 10 de diciembre de 2015, cuando asumió Mauricio Macri, el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la ANSES era de US$62.157 millones. Según el último informe de septiembre de 2018, al tipo de cambio de $29,57 por dólar del 29 de junio (hoy la divisa roza los 50 pesos), se ubicó entonces en el equivalente a US$46.364 millones. Hace poco, el Centro Nacional de Jubilados y Pensionados de ATE que la Secretaría de Finanzas y Secretaría de Hacienda dispuso la trasferencia de $96.000.000.000 millones del FGS a letras del Tesoro nacional a los efectos de hacer frente a gasto corriente.

En la práctica, el organismo recortó los subsidios a discapacitados y las jubilaciones perdieron sólo en el último año 12% de poder adquisitivo. Gracias a la nueva fórmula de movilidad, y en comparación con la anterior, en un año y medio los jubilados de la mínima perdieron $8.925, casi un mes de haberes. Un informe del CEPA sostiene que en el trascurso de 2018, el cambio de movilidad significó una reducción de las jubilaciones, salario familiar, Asignación Universal por Hijo y Pensiones No Contributivas de cerca de $55 mil millones.

  • Niñez: El 48% de los niños, niñas y adolescentes en Argentina es pobre, según un estudio de UNICEF que mide la pobreza multidimensional. De ese total, 20 puntos porcentuales corresponden a privaciones “severas”, como vivir en una zona inundable y cerca de un basural o no haber ido nunca a la escuela entre los 7 y los 17 años, mientras que un 4,9% viven en la “extrema pobreza” (no alcanzan a cubrir una canasta básica de alimentos). En cifras concretas, hoy son 6,3 millones de niñas y niños que ven vulnerado el ejercicio efectivo de sus derechos.
  • Desigualdad: El coeficiente Gini –uno de los indicadores más usados para evaluar la diferencia entre pobres y ricos, que va desde 0 (igualdad absoluta) a 1 (total desigualdad)- durante el primer trimestre de ese año se ubicó en 0,447 puntos, muy por encima de los 0,427 del segundo trimestre de 2016, primer dato disponible. En otras palabras, la Argentina es más desigual desde que asumió el macrismo.
  • Salarios: A diciembre de 2015, el salario mínimo en la Argentina equivalía a 580 dólares, el más alto de la región. La gestión macrista terminará con un salario mínimo de 279 dólares, lo que empujó a la Argentina al séptimo lugar, apenas por arriba de Venezuela.
  • Producción: La utilización de la capacidad instalada de la industria se ubicó, en mayo de 2019 –último dato disponible- en el 62%, tres puntos por debajo del mismo mes de 2018. La producción industrial cayó, en junio, un 7% y acumuló 14 bajas consecutivas. La construcción, en tanto, se contrajo 4,2% en junio frente al mes previo y 11,8% interanual.

Se calcula que desde el comienzo de la gestión de Macri cerraron 25.000 pymes y 85.000 comercios.

  • Balanza comercial: Tras la apertura de importaciones, la balanza comercial acumuló una pérdida de US$ 1127 millones. Los ocho primeros meses de 2018 cerraron con saldo negativo y la tendencia sólo se revirtió a fuerza de una recesión que pinchó el consumo y el consiguiente ingreso de mercaderías. Las exportaciones, por su parte, se primarizaron, es decir que se redujeron casi exclusivamente a materia prima sin valor agregado.
  • Devaluación: Desde la asunción de Mauricio Macri, la devaluación del peso superó el 80%. El dólar oficial, que al cierre de esta nota ronda los $47, se encontraba a poco más de $9 a fines de 2015. El dólar que circulaba de forma ilegal, al que la prensa solía llamar blue, oscilaba los $14. Si se tiene en cuenta el primero, su valor se quintupilicó. De acuerdo con el segundo, se triplicó con creces. 
  • Justicia y Derechos Humanos: Al nombramiento de dos jueces de la Corte Suprema por decreto presidencial a poco de asumir, le siguió el cierre de numerosas fiscalías y defensorías de la mujer y el desfinanciamiento de fiscalías especializadas, como la de Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad, lo que retrasó los juicios.

Durante estos cuatro años, se multiplicaron las prisiones domiciliarias para genocidas, las prisiones preventivas sin proceso firme, se extravió un submarino con 44 tripulantes, y desde el Ministerio de Seguridad y la Presidencia de la Nación se justificó y premió el accionar represivo y el gatillo fácil de las fuerzas de seguridad en numerosos hechos, como el policía Chocobar, la Gendarmería en el caso de Santiago Maldonado o la represión a jóvenes integrantes de la agrupación La Poderosa.

  • Corrupción: Pese a que el combate contra estas prácticas fue un caballito de batalla del discurso macrista, a poco de asumir la Ley de Blanqueo de capitales terminó permitiendo que ingresaran en él parientes y amigos de los funcionarios en ejercicio.

El propio Mauricio Macri apareció como dueño de varias cuentas off shore en el escándalo internacional de los Panamá Papers, al igual que algunos de sus funcionarios, y la campaña bonaerense de Cambiemos en 2017 terminó en la Justicia por haber incluido como aportantes de campaña a beneficiarios de planes sociales que jamás aportaron.

El conflicto de intereses producto de nombrar CEOS de empresas en puestos del Estado que debían controlarlas se convirtió en un sello de la gestión.

El Presidente le condonó a la empresa de su familia una deuda con el Estado por la concesión del Correo Argentino de $70.000 millones.

Actualmente, los Tribunales investigan una red de espionaje paraestatal que alcanzaría a funcionarios, jueces, fiscales y periodistas.

  • Educación y Ciencia: El Plan Conectar Igualdad, que abastecía de computadoras a los niños en edad escolar, fue desmantelado a poco de comenzar la gestión macrista. La vicedirectora y el auxiliar docente de la escuela 49 de Moreno, Buenos Aires, murieron como producto de la explosión de una garrafa cuya fuga habían denunciado. El hecho dejó en evidencia el pésimo estado de las escuelas en la Provincia, lo que continúa sin arreglo.

También se redujeron los ingresos de investigadores al Conicet y se paralizó el desarrollo de una nueva central atómica en Lima, del reactor Carem 25, y del satélite Arsat 3.

  • Salud: El área perdió su estatus de Ministerio. Mientras tanto, se terminó con el Plan Qunita que pretendía mejorar la salud de los recién nacidos y combatir la muerte por colecho. Entraron en falta vacunas y remedios para el tratamiento de la tuberculosis y el VIH. La situación de desabastecimiento en los hospitales empeoró.

Desde 2015, los medicamentos subieron el 314% y los remedios esenciales, 784%. En lo que va de 2019, ya cerraron 61 farmacias.

Ilustración: Marcelo Spotti y Nahuel Croza

Fuente: www.canalabierto.com.ar