Declaración de UTS-CTA ante lo sucedido en el Neuropsiquiátrico

“Una paciente de 35 años se suicidó el día jueves en el Hospital Neuropsiquiátrico de Córdoba. Era su primera internación, tenía 3 hijos. Esta nueva situación de crisis evidenció el profundo abandono de las autoridades por los pacientes y trabajadores.

“Hace semanas venimos reclamando por mejores condiciones para nuestro internado, incluso hemos hecho innumerables protestas en los últimos días por este problema. Los trabajadores de la salud padecemos cotidianamente incontables problemas para desarrollar nuestras actividades: Pésimas condiciones salariales y laborales, un gran porcentaje de nosotros estamos por debajo de la línea de pobreza, padecemos desgaste y precariedad laboral, falta de insumos e infraestructura mínima y hasta agresiones físicas.

“Pero en estas últimas semanas protestamos puntualmente por el estado del internado. En cada asamblea planteamos lo mismo: El internado no puede seguir así y en cada nota periodística lo dijimos. Una semana antes, habíamos solicitado audiencia ante el ministro, donde mencionábamos expresamente la situación del internado. Pocas horas antes de que trascienda la noticia se ingresaba un pedido de informes muy detallado en la legislatura.
Un día después de esta terrible situación, todas las autoridades sanitarias de la provincia, tanto de las autoridades sanitarias de la provincia, tanto de la Secretaría de Salud Mental como del Ministerio, concurrieron al Hospital en una clara respuesta tardía y oportunista.

“La falta de un protocolo de guardia y actuación ante este tipo de emergencias y ante incendios, la falta de vías rápidas de acceso para el servicio de emergencia, la falta de elementos básicos que tuvieron que ser trasladados de la guardia, la falta de toma corrientes, que fueron remplazados por alargadores que sostenía una enfermera en el pasillo; y más importante aún, la falta de habitaciones de cuidado especiales (sólo hay una) y de una verdadera sectorización y diagramación que permita una pronta respuesta, son sólo algunos de los problemas que tiene nuestro internado. Meses reclamando la incorporación de enfermeros y la asignación de un médico como responsable y tampoco obtuvimos respuestas.

“Una guardia sin protocolo, un internado de hospital sin un profesional responsable. Así está nuestra institución. Por eso, y por no reducir al mínimo las posibilidades de que nuestros pacientes se lesionen o mueran, el Estado es responsable.

“El comportamiento de la Secretaría de Salud Mental y del ministerio es consecuente con el desconocimiento de la complejidad de la psicopatología que se atiende en el hospital (la suma de la gravedad de los cuadros más la gran vulnerabilidad social de su población) pero acorde con la política de debilitamiento sistemático del hospital en procura de una interpretación espuria de la ley de salud mental. Aún cuando la población que se asiste en el hospital es de extrema gravedad, el hecho de un suicidio (que no es excepcional) golpea fuertemente al equipo de salud.

“Como en otras oportunidades, la actitud de la Secretaría en cuanto a contención y acompañamiento es inexistente, provocando la sospecha de que a raíz de sus deberes de funcionarios debieron abandonar su condición de profesionales de la salud mental.

“Seguimos exigiendo una transformación profunda de nuestro hospital y la efectiva aplicación de las leyes de salud mental. Las autoridades provinciales no pueden ignorar lo sucedido, no podemos seguir como si nada hubiera pasado. Recordamos a la población que el hospital continúa de asamblea permanente y solo se asisten emergencias.

“Este martes 11 de febrero a las 10 horas realizaremos una asamblea y posteriormente una conferencia de prensa”, finaliza el pronunciamiento de la Unión de Trabajadores de la Salud de Córdoba (UTS-CTA) que encabeza Gastón Vacchiani como Secretario General.