El 8M, 97 mujeres empleadas del Municipio de Villa María, del Área Salud, elevaron una nota al Intendente Municipal, Eduardo Accastello, manifestando su disconformidad con el aumento que éste pactó con el SUOEM Villa María.
Esa entidad gremial, sin realizar asamblea alguna, aprobó una paritaria a la baja que implica una fuerte disminución del poder adquisitivo de los magros sueldos municipales. Luego del 23% de índice inflacionario en diciembre, casi el 21% en enero y el 15% que se espera para febrero, Accastello firmó un aumento del 23,5% para el sueldo de febrero, tomando como base el sueldo de noviembre del 2023.
Las mujeres son claras en su planteo señalando que ese aumento “fue acordado por delegados gremiales sin haber sido puesto a consideración del personal del área”. Un dato que puede sumarse, más allá de la nota en sí, es que estas mujeres hicieron una asamblea en la Asistencia Pública luego de que se supiera de la aprobación de estos porcentajes. Allí pidieron explicaciones al delegado Villegas quien manifestó haberse opuesto, pero su mentira quedó al descubierto cuando las mujeres escucharon el sonido grabado en la reunión del encuentro de los delegados con la Comisión Directiva del SUOEM, donde se escucha a Villegas aprobando y pidiendo que los delegados presentes dieran el sí al aumento.
Volviendo a la nota presentada el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, allí se fundamenta que el aumento “insuficiente… sobre salarios básicos bajos” no llega a cubrir la suba de la Canasta Básica de Alimentos ni el de la Canasta Básica Total. Es por ello que solicitan una “urgente recomposición salarial”. Las mujeres y hombres firmantes identificados como Trabajadore/as Autoconvocados de la Secretaría de Salud de la Municipalidad de Villa Marìa, esperan respuesta del Intendente Municipal Accastello.
El planteo de este núcleo de Autoconvocados es coincidente con lo sostenido públicamente desde la Unión de Trabajadores de Estados Municipales (UTEM-CTAA) que denuncia que ese acuerdo paritario es ilegal y que sólo se trata de un pacto espurio entre el Departamento Ejecutivo Municipal y la referida entidad gremial que, en realidad, no representa el sentir de los municipales de Villa María.
“Es una vergüenza lo que acordaron, que es una traición a los compañeros” señaló Jesús Chirino, Secretario General de UTEM y Secretario Gremial de la CTA Autónoma Regional Villa María en una radio local, agregando que “debería darles vergüenza jugar así con el sueldo de cada compañero municipal. No se puede sentarse con el intendente para acordar cómo se les baja el sueldo a los municipales. Esta gente está muy cuestionada y es hora que los compañeros y las compañeras se organicen en otros espacios gremiales como nuestra UTEM o el propio ATE. Debemos entender que necesitamos pelear por nuestro sueldo y condiciones de trabajo. Está claro que viene desde el lado del otro gremio”.