Por Santiago Rodríguez*
En la esquina de Sadi Carnot y Roque Sáenz Peña, en el oeste de Río Cuarto, se encuentra el Centro Comunitario “La Barriada”, que además de darle de comer a lxs vecinxs y articular mediante talleres educativos y culturales; es el lugar donde la Murga “Los Retumbones Desbocaos” empezó a ensayar para los carnavales del 22, 23 y 24 de febrero.
En el sol pega fuerte en el asfalto, empieza a sonar el tiempo del bombo y las patadas vuelan por el aire, entendiendo que al saltar, dejando los brazos moverse, se alimenta en el pecho el sentido de la libertad. Una libertad construida entre lxs que componen esta murga y que reflejan y visibilizan las ausencias y resistencias de los que luchan día a día por la falta del Estado, el hambre, la violencia policial. Demostrando, una vez más, que colectivamente se puede laburar por una sociedad más justa, donde quepamos todxs.
Con una mística de clase trabajadora suena el silbato y la murga empieza a tocar, cantar y bailar para gritar una vez más que el Carnaval es nuestro.
Guadalupe Reynoso (Guada) es integrante de la murga actualmente y Matías Giuliani (Mati) fue uno de lxs que estuvieron al principio cuando se empezó a pensar espacios y herramientas para romper con la represión que día a día resistían lxs compañerxs de los sectores populares.
-¿Cómo empezó la idea de conformar una murga?
Mati– Siempre fue una inquietud que tuvimos desde que recuperamos la CTA en Río Cuarto, con la Juventud como herramienta principal, por eso con algunas actividades de autogestión, compramos un zurdo y tres redoblantes. Tocábamos en marchas y en distintas actividades. En el año 2004 hicimos un taller intensivo de percusión y baile con tres compañerxs de la Murga “Los Verdes de Monserrat”, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Aprendimos ritmos básicos y baile, expusimos lo aprendido ante amigxs y familia en el mítico primer local de la CTA que quedaba en la esquina de 9 de Julio y Sebastián Vera. Después tocábamos en los barrios, con los pibes y pibas de los comedores, hasta que en el año 2006 decidimos perfeccionarnos más aún y convocamos a dos compañerxs de la Murga “Okupando Levitas” de Rosario, quienes durante meses nos enseñaron baile y percusión, y desde entonces empezamos a comprar más instrumentos, seguimos dando talleres en los barrios, tocando en marchas y también la convertimos en herramienta de autogestión.
-¿Qué te generó formar parte?
Mati- Anhelo esos años de juventud donde compartíamos en familia, mis hermanxs, muchxs amigxs, compañerxs. Fraternizar y tener afectos dentro de la organización donde uno milita es impagable, porque sin afecto indudablemente no se puede construir, por eso tengo muchos recuerdos hermosos. Como anécdota, los colores de la murga, fueron elegidos en lluvia de ideas por las niñas y niños de barrio Hipódromo durante una jornada solidaria en la escuela Racedo, a la cual asistieron compañerxs de toda la provincia, donde laburamos en grupos en 4 o 5 barrios de la ciudad, pintando murales, terminando piezas que construíamos, huertas comunitarias y dormíamos en la escuela. En la última jornada se hizo una choripaneada de cierre con todos lxs pibxs del barrio y los colores violeta, rojo y amarillo salieron de ellxs en ese encuentro.
-¿Qué significa para ustedes participar del Carnaval?
Guada– Hace dos años no estábamos participando más del Carnaval, pero decidimos ponerle una vez más el cuerpo por una cuestión de que queremos visibilizar la lucha de todos los días. Entendimos que es una oportunidad para demostrarle al otro que nos mira en la calle, en los medios pidiendo alguna colaboración o pidiendo reuniones con los diferentes estamentos del Gobierno, creo que sirve para eso, para que vean que hay un laburo real, importante y que no sólo pedimos bolsones o planes sociales. Ahí está la clave nuestra.
-¿Crees que es una buena herramienta de transformación social?
Guada– Yo creo que como herramienta de transformación, lo que hace la Murga no lo hemos hecho con ninguna otra actividad. Tenemos chicos de cuatro años hasta adultos de ochenta, entonces, creo que esa es la herramienta más grande de transformación. La Murga como inclusión de todo tipo, la Murga como modo de protesta, porque no es que somos solo una Murga de Carnaval, la Murga nuestra acompaña los distintos reclamos y la lucha de lxs compañerxs, es la que banca en cada toma, la que banca cuando hay despidos. El bombo siempre está y nosotrxs lo vemos como que esa es la razón más firme de que la Murga es necesaria y en estos tiempos indispensables para la inclusión. Lxs pibxs en vez de andar deambulando por ahí de enero a enero están ensayando en la barriada, en lo del Noné. Y en cuanto la militancia también sabemos que tenemos el Carnaval en la venas y en la sangre, no por el hecho del baile, ni de tocar bien, si no por el hecho de que la mística que generamos con la Murga nos sirve para darnos cuenta de que hay posibilidad de transformación cuando le metés garra.
-¿Qué te significa para vos ser parte?
Guada- Personalmente, como militante de la CTA y que empecé militando en La Barriada, cuando ya estaba conformada la Murga, es algo que te enorgullece ver lxs mismxs pibxs que iban a apoyo escolar hoy enseñándote, ahí está lo bueno de esto, el vínculo y el aprender a la par. También les hace entender a lxs pibxs por qué vamos a tocar a una marcha, porque vamos a dar la lucha, creo que el acompañarnos en esos momentos les hace entender un montón de cosas. Y participamos del Carnaval por eso también, porque somos pueblo, somos calle, somos lxs pibxs que luchan día a día por una Educación digna, los que laburan para poder terminar el colegio.
El Carnaval no es un negocio, es una de las máximas expresiones que tenemos los sectores populares de expresar y visibilizar la lucha diaria que damos en el territorio. No lo queremos vallado, romantizado, ni exageradamente lleno de policías.
Porque aunque siempre tratan de voltearnos la calle está cortada y nosotrxs bailando, saltando, tocando y mostrando con lucha construida, que el hambre es un crimen y que queremos mayores posibilidades para lxs pibxs. Que queremos Educación de calidad, Salud de calidad, ni un policía caminando nuestras cuadras y Presupuesto para la Cultura Popular.
Los ensayos de la Murga son los días miércoles y viernes de 17:30 a 19:30. Si no tenés instrumento venite. Si no tenés traje venite. Y si tenés vergüenza venite que la tumbamos bailando.
Fotos: Jésica Mancilla
*Periodista callejero. Militante territorial de la CTA Autónoma Regional Río Cuarto