Godoy: “El Gobierno redujo en forma brutal el salario del trabajador”

El movimiento sindical y la organización del mundo del trabajo se convirtieron en ejes de fuertes ataques por parte del gobierno nacional en plena campaña electoral, a la que además se sumaron grupos empresarios que cuestionaron la organización gremial y demandaron con urgencia una reforma laboral. Con las exigencias del Fondo Monetario Internacional a cuestas en ese sentido, esta premisa se instaló como uno de los principales arietes del macrismo.

“Esta últimas agresiones, ataques directos del presidente amenazando con instalar la reforma laboral y avanzar sobre los derechos de los trabajadores, no es algo nuevo, pero sí muestran cuál es el eje de campaña que definió el presidente de la Nación”, dijo el secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Hugo “Cachorro” Godoy, un sindicato que sufrió las primeras ofensivas oficiales cuando se produjo el masivo despido de trabajadores estatales.

De cara a un proceso electoral que involucra un padrón de más de 300 mil afiliados, el gremio de los estatales volvió a cuestionar el modelo que “trabajó de manera brutal para reducir los salarios de los trabajadores”, dijo Godoy y anticipó que seguirán confrontando las políticas del actual gobierno nacional.

—¿Qué análisis realiza de esta nueva ofensiva del gobierno al movimiento sindical por parte del presidente Macri y algunos empresarios?

—Durante res años y medio Macri ha gobernado para los ricos y las empresas trasnacionales. Ha facilitado la fuga de capitales, ha endeudado el país para hacer una gran timba financiera y ha destruido el aparato productivo, generando recesión y desocupación, ha trabajado para reducir los salarios, cosa que hizo de manera muy brutal. Así que su alianza con los grandes empresarios que están más vinculados a las empresas trasnacionales y al mercado internacional que al interno, es un vínculo muy fuerte, claro. Estas últimas agresiones, ataques directos del presidente amenazando con instalar la reforma laboral y avanzar sobre los derechos de los trabajadores, no es algo nuevo. Sí, lo que significan es cuál es el eje de campaña que definió el presidente de la Nación. Es una campaña que está financiada por el FMI, entonces los objetivos que tiene que tener están en contra de las mayorías del pueblo argentino. Entonces, esto es lo que explica estas agresiones. Pero por otro lado, hay que decir que el gobierno ataca a los dirigentes sindicales que se oponen a su política. Mientras tanto, es absolutamente condescendiente y permanentemente hace acuerdos con los dirigentes sindicales amigos, como hace quince días atrás hizo con UPCN, firmando un convenio colectivo para 2.500 funcionarios del máximo rango del Estado nacional para garantizarle su continuidad laboral durante los próximos cinco años, para que sean el factor que trabe o limite el funcionamiento del futuro gobierno. Porque yo estoy seguro que en octubre este gobierno de Mauricio Macri va a ser derrotado en las urnas y va a abrir la perspectiva de un nuevo gobierno en Argentina. Y entonces, lo que quieren estos grupos empresariales es tener el control del manejo del Estado y para eso acuerdan y consolidan su alianza con su sindicalismo amigo para llevar adelante todas estas cosas.

—En los últimos años el trabajador estatal, sobre todo el que está representado por ATE, se convirtió en una especie de obsesión en la confrontación con el gobierno. ¿Cómo es la experiencia de su gremio durante estos años del gobierno macrista?

—El gobierno ha decidido un acuerdo con su sindicato amigo, que les ha convalidado los despidos masivos de trabajadores. Echaron a 35 mil trabajadores en el Estado nacional y, además, han convalidado la reducción salarial que fue muy fuerte. Nosotros hemos perdido cerca de ocho salarios de los trabajadores. Eso quiere decir que decididamente nos han esquilmado la capacidad adquisitiva de nuestros sueldos, y todo en función de fortalecer el manejo en la estructura del Estado y no permitir que el Estado se democratice. Así que nosotros venimos reclamando que la paritaria sea plena, de participación, pero el gobierno no quiere abrir los padrones para comparar los de ATE y de UPCN porque le conviene hacer figurar como que éste último, que es su sindicato amigo, es mayoritario y con eso convalida sus políticas nefastas.

—Ud. mencionaba a la reforma laboral como eje de campaña del oficialismo. Algunos gremios ya están organizando movilizaciones para resistirlo. ¿Qué actividades planean desde ATE?

—Desde ATE vamos a seguir confrontando con estas políticas y esto quiere decir que vamos a darle continuidad a los planes de lucha. También estamos en un proceso interno. El próximo 7 de agosto el gremio va a elecciones en todo el país. En Rosario vamos a tener la responsabilidad de expresar la mejor propuesta de cara a la necesidad de los trabajadores. Vamos a proponer a los afiliados que esta conducta de nuestro gremio sea ratificada en las urnas.

—ATE es un sindicato emblemático por su historia de lucha. ¿Qué representan estas elecciones, cuántos cargos se eligen?

— Son muy importantes. Vamos a elegir 180 seccionales, 24 conducciones provinciales y la conducción nacional, 6.755 dirigentes. Vamos a las urnas ese día con un padrón de cerca de 300 mil afiliados. Eso quiere decir que a pesar de los golpes infligidos por las políticas de ajuste y saqueo del gobierno de Macri, ATE siguió creciendo, fortaleciendo la organización de los trabajadores y esperamos que eso se vea reflejado en las urnas porque para nosotros es muy importante la participación protagónica de todos los afiliados. Eso hace grande al gremio.

Fuente: www.lacapital.com.ar