Dialogamos con Enrique “Tito” Godoy, Secretario General de la CTA Autónoma Regional Villa María, quien nos compartió una evaluación de la jornada de protesta del 24 de enero en la ciudad y perspectivas de lucha.
-¿Cómo se gestó la organización del paro y movilización del 24 de enereo en Villa María?
-Habíamos quedado de acuerdo después de trabajar desde distintos sectores en la asamblea que se hizo en la plaza Centenario junto a integrantes del “Cordobazo Cultural”.
Allí comenzamos a delinear el acto para empezar con intervenciones artísticas, tomar el micrófono y dar lectura a un documento común sobre los objetivos que nos aglutinan y pensar en construir un proceso de unidad para todo lo que se viene porque no termina ahí.
Es necesario construir una organización que nuclee a todos los sectores y que sea independiente de los partidos políticos y de quien gobierne. Hemos visto que una vez dictado el DNU fue aprovechado en lo provincial y en lo municipal, dónde se han producido despidos en el hospital Pasteur y también en la Municipalidad. Nosotros estamos al frente de una política que lo único que hace es precarizar más al trabajador.
-¿Cuál es la situación de la organización de trabajadores en el marco de la precarización?
-Lamentablemente el trabajador ha normalizado la precarización y el sistema de contratación y es un problema para organizarse. Porque se tiene miedo y se naturaliza eso. Hay prácticamente más de 100 trabajadores en la municipalidad echados. Tampoco se puede dar un número porque es muy desordenado el proceso. A nosotros desde la CTA-A nos han ido a visitar unos 30, y lamentablemente la organización que tendría que estar defendiéndolos solamente les está dando un descuento para la entrada del Festival de Peñas.
El impacto local es profundo. Se han desarmado equipos enteros de trabajo como en el hogar de ancianos, en salud, en prevención de drogas, trabajadores que venían con más de cinco años de trabajar y me parece que eso no atenta solamente con el trabajador, sino con la prestación que se brinda, disminuyendo la calidad en la atención.
¿Cuáles son las perspectivas desde la CTA-A?
-Nosotros con una u otra administración vamos a representar los intereses de los trabajadores, nuestro estatuto establece que debemos ser independientes y autónomos de los partidos políticos y de los patrones y eso lo hemos respetado a rajatabla porque tenemos militancia durante mucho años.
Ahora me parece que esta situación se va a ir depurando en el ámbito de la discusión sobre quienes también integramos sindicatos, y es una buena oportunidad para discutir todo.
-¿Cual es la situación en tú sector, particularmente desde ANSES?
-Nosotros como entidad nacional tenemos que ver qué es lo que tenemos proyectado hacia delante para trabajar y ver cuántos trabajadores vamos a necesitar. Vemos que están faltando trabajadores y también programas que se dan de forma atemporal y así es imposible proyectar.
Hoy desde ANSES se ven los niveles de precarización cada vez mayores sobre los trabajadores, donde prácticamente un 60% están en negro, cada vez tenemos menos aportantes al sistema previsional y por ende menos trabajadores que llegan a los años de aporte, esto sin la moratoria hoy no hubiera sido posible para muchos. Más que discutir quienes van a continuar, deberíamos estar discutiendo cuáles son los objetivos del ANSES.
Que también está en el centro de escena incluido en el DNU. Porque es desde el Fondo de Garantía de Sustentabilidad donde se financian los haberes y el cobro de las jubilaciones y es desde donde se podría haber dado un aumento para los jubilados que están por debajo de la línea de la pobreza.
-¿Cómo ves la implementación de la “Ley Ómnibus” y el DNU?
-Hoy el objetivo principal de la Ley Ómnibus y del DNU es darle beneficios a las empresas extranjeras multinacionales que nada más vienen a saquear al país. Y nuestra posición tiene que ver con esto. Plantean la necesidad de una precarización laboral que necesitan para invertir, pero nosotros ya estamos precarizados.
Hoy el salario de un trabajador en Argentina solamente está por debajo de Venezuela. Es uno de los sueldos más bajos de América. No sé qué más pretenden.
Está planteado en el DNU: 12 horas de trabajo sin pagar horas extras, no pago de indemnizaciones y medidas represivas. Si este proyecto fuera a beneficiar a los trabajadores no sería represiva, al contrario serían aplaudidos.
Con este marco de preocupación que estamos atravesando vemos la necesidad de juntarnos entre los trabajadores y eso también lo ha logrado Milei. Se empiezan a ver esquemas de organización, de unidad. Para nosotros hasta hace muy poco tiempo era muy difícil.
Fuente: www.tribunavm.com.ar