Trabajadoras y trabajadores reclamaron este martes ante la oficina del Intendente de Villa María, Martín Gill. Desde hace meses vienen pidiédole una mesa para solucionar temas tan importante como la reincoporación de trabajadores despedidos, de manera arbitraria, en Salud; alimentos para comedores populares; aumento de sueldo para los municipales; terminar con la precarización laboral y el cese de la violencia en los ámbitos laborales municipales.
Desde la Intendencia no se hacen cargo de las demandas; no se regulariza la entrega de alimento a los comedores populares; los despedidos siguen sin su trabajo; los sueldos municipales siguen siendo de hambre; la precarización de las relaciones laborales afecta a más de 800 trabajadores y el intendente arregló regularizar, mediante concurso cerrados, sólo unos 100 puestos.
Los sueldos municipales arrancan en poco más de cincuenta mil pesos en algunas trabajadoras de limpieza; a profesionales de bibliotecología, personal de señalética, agentes de salud, etc. les pagan setenta mil pesos. Si a esto se le suma amenazas de ser despedidos si participan en manifestaciones, gritos de parte de funcionarios, pedidos para participar de actos políticos, etc, la violencia que se ejerce sobre los trabajadores y las trabajadoras es inusitada e intolerable. Esos sueldos son de precarizados, pero no están en mejores condiciones quienes pertenecen a planta permanente.
El 7 de marzo pasado la CTA Autónoma y ATE Córdoba acompañaron a la Regional Villa María de la Central, junto a la Federación Nacional Territorial (FeNaT-CTAA) para reclamar una audiencia con Martín Gill. El Secretario de Gobierno, Eduardo Rodríguez, prometió un encuentro, pero luego el Municipio desconoció ese acuerdo y señalaron que no habría reunión.
Este martes regresó la protesta de los trabajadores reclamando el diálogo, ahora acompañados por la FeNaT de Río Cuarto, CTA provincia y ATE Córdoba. El Intendente, Martín Gill, por estos días imputado por Violencia de Género y lesiones leves, no abrió un canal de diálogo para atender estos problemas relacionados con el hambre en los barrios, la dignidad en el trabajo, la Violencia Laboral y la reinstalación de trabajadoras y trabajadores despedidos por solicitar mejor condiciones para ellos y sus compañeros.
Desde las diez de la mañana hasta pasado el mediodía de ayer, la protesta se adueñó de la esquina frente a la sede municipal. Quienes tomaron la palabra dejaron en claro el pedido de diálogo y, también, aportaron interesantes conceptos. Alguien señaló que “es triste que a 40 años de la recuperación de la democracia tenemos un Intendente que se esconde negándose al diálogo. Porque hace meses que le pasamos notas y no nos recibe. Ahora comenzamos con las manifestaciones callejeras, esta es la segunda ¿Qué espera? Hablamos de hambre, de violencia, de sueldos dignos, de trabajadores despedidos por un secretario de salud acusados, en tribunales, de violento”.
Una compañera que tomó la palabra marcó: “Viene el 24 de marzo, realizarán actos donde hablarán de memoria” y luego se preguntó si es una memoria real. ¿Acaso no se recuerda que fueron los trabajadores y las trabajadoras quienes más sufrieron la dictadura? ¿Acaso es una memoria que los lleva a hacer sufrir a quienes trabajan? ¿A que avalen la Violencia Laboral?”.
Hablaron trabajadoras y trabajadores de Río Tercero, Río Cuarto, Córdoba, municipales de Villa María y compañeras del MST local, al igual que la dirigencia de CTA de la ciudad. Todos pidieron diálogo, lamentaron tener que gastar tanto esfuerzo para buscar espacios de debate y acuerdos con el Departamento Ejecutivo, cuando la historia sería distinta si el Intendente se dispusiera a hablar con quienes tienen los problemas.
Una de las principales consignas de la manifestación fue que ningún trabajador tenga sueldos por debajo de la Canasta Básica, el pase a planta del personal bajo relación laboral precaria, la recuperación del 82% móvil en jubilados y la atención a los reclamos de los comedores comunitarios que reclaman alimentos para atender la creciente demanda existente en las barriadas populares de la ciudad.
Por otro lado, solicitaron que “los gobiernos atiendan las demandas de los trabajadores del Hospital Pasteur y de la Secretaría de Salud del Municipio”.
En relación a la Secretaría de Salud, cuyo titular ha sido denunciado por casos de Abuso y Violencia Laboral, demandaron nuevamente la reincorporación de los tres empleados a quienes en el verano no les renovaron su trabajo como ‘facturantes’.
Entre otros y otras participaron de la Jornada de Lucha frente al Municipio el Secretario General y la Secretaria Adjunta de la CTA-A Villa María, Enrique “Tito” Godoy y Thelma Gómez, respectivamente; el Secretario Gremial, Jesús Chirino; la integrante de la Comisión Ejecutiva Regional, Sonia Ramadori; el Secretario General de la CTA Autónoma Regional Córdoba Capital, Jorge Chalup; Javier Bracamonte, Irina Silberman y Juan José Juárez de ATE Córdoba; y representantes del Sindicato de Personal de Industrias Químicas y Petroquímicas de Río Tercero (SPIQyP).
Fuente: Equipo de Comunicación de la CTA Autónoma Regional Villa María