El Gran Córdoba se volvió más desigual tras la pandemia

Por Marcelo Lucero

En Argentina, pero con mayor estruendo en el Gran Córdoba, la pandemia profundizó la desigualdad socioeconómica preexistente, y deterioró la calidad de las fuentes laborales, generando trabajo infantil, subocupación y empleo informal.

Las conclusiones se desprenden del informe “Impacto de la pandemia en el trabajo y la pobreza: Los desafíos de la inclusión social post Covid 19 en la provincia de Córdoba” (la investigación completa se puede descargar desde: https://bit.ly/3HXny1K) presentado hace un mes al Foro de Rectores de Córdoba por el Observatorio de Políticas Sociales de Córdoba, compuesto por miembros de nueve universidades asentadas en esta provincia. El estudio relevó 42 documentos y 21 fuentes estadísticas referidos al impacto de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus a nivel mundial, latinoamericano, nacional y provincial. Estos documentos corresponden a informes oficiales y reportes de investigaciones de organismos públicos y privados, y abarcan el período que va entre marzo de 2020 y junio de 2021.

La ingeniera Lorena Barale, directora de la investigación y perteneciente a la Facultad Regional Córdoba de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), dijo en declaraciones a HOY DÍA CÓRDOBA que “los efectos de la pandemia respecto al mercado laboral mostraron situaciones de exclusión y desigualdad previas” a la aparición del Covid-19, “pero que en este contexto se profundizaron”. “Se profundizó el trabajo infantil, los jóvenes se vieron en dificultades para encontrar la inserción laboral y, a nivel de género -siempre respecto a las mujeres-, se acentúa el desempleo en todos los grupos etarios”, detalló sobre las principales conclusiones de la investigación. Barale también explicó que el aumento del trabajo infantil está relacionado con la pérdida de cantidad y calidad de fuentes laborales: “Se menciona en distintos informes esto del aumento (del trabajo infantil), porque al perderse mucha cantidad de empleo, cuando la familia tiene que comer y se pierde el ingreso, los chicos de 13, 14 años, o incluso de menos, tienen que estar afrontando esas situaciones”.

El Gran Córdoba se volvió más desigual tras la pandemia

Sin embargo, pese a la reactivación económica, la especialista advirtió que la recuperación de puestos de trabajo no redundó, en la provincia y particularmente en el Gran Córdoba, en una disminución de la desigualdad. “Aún alcanzando los mismos niveles de tasa de empleo casi a los de prepandemia, lo que es la evolución de la pobreza subió, especialmente en Córdoba”, sostuvo Barale. Y agregó: “La pobreza pasó, en la provincia, en el primer semestre del 2020, del 28,2% al 34,3% en el primer semestre del 2021, cuando a nivel país se mantiene en 31,2%”.

Esto, según la investigación, da cuenta de que, si bien se recuperaron puestos laborales, estos perdieron calidad y pasaron de ser relaciones laborales estables y trabajo registrado a empleos informales y precarizados.

Del trabajo participaron la UTN regionales Córdoba y San Francisco, la Universidad Nacional de Córdoba, Universidad Provincial de Córdoba, Universidad Católica de Córdoba, Universidad de la Defensa Nacional-Centro Regional Universitario Córdoba, Instituto Universitario Aeronáutico, Universidad Blas Pascal, Universidad Siglo 21, y el Instituto Universitario de Ciencias Biomédicas de Córdoba.

El Covid develó la profundidad de la brecha digital en la provincia

Lorena Barale también destacó que la pandemia de coronavirus trajo aparejados nuevos problemas. Ejemplo de ello fue la brecha digital, que dejó en evidencia la diferencia de acceso a internet, en relación a la calidad de conexión y a la cantidad de dispositivos con los que cuenta una familia para realizar sus actividades laborales y educativas de forma virtual.

“No todos los grupos socioeconómicos tienen el mismo acceso a la conectividad digital”, afirmó al respecto la investigadora. “A eso también se suma que, al estar desde casa, muchas mujeres se vieron como desbordadas en la cantidad de trabajo, porque no solamente tenían que continuar con sus trabajos cotidianos desde la casa, sino también encargarse de la cuestión familiar”, explicó.

Y agregó: “Se multiplicaron las situaciones de estrés y tener que dividirse entre un montón de tareas en lo que es el núcleo familiar y, por otro lado, estando dentro del mismo lugar físico es más difícil cortar los horarios de trabajo”.

Un plan innovador, inclusivo e integral para revertir la situación

La especialista destacó que, para generar una recuperación del empleo genuina que se pueda mantener en el tiempo, debe llevarse adelante un plan que ofrezca soluciones a los más desfavorecidos. Al respecto, Barale indicó que dicho plan deberá apuntar a la “inclusión social” con un enfoque “innovador, inclusivo e integral”.

Innovador, ya que, según Barale, “hasta acá, las políticas laborales y sociales que se han llevado a cabo no están dando el resultado esperado”. “Desde el observatorio de políticas sociales hicimos un informe en el año 2017 donde, justamente, relevamos las políticas sociales que se estaban llevando a cabo en Córdoba y ya ese informe dejaba ver que no estaban dando el resultado esperado”.

El plan también deberá ser integral, es decir que “no solo incluya al gobierno, sino a los sectores productivos para que trabajen en conjunto”. E inclusivo, para que promueva la “igualdad de oportunidades” y tienda atienda las “particularidades de la inclusión laboral juvenil y disminuya las brechas digitales”.

Fuente: www.hoydia.com.ar