Fábrica Argentina de Aviones: 500 días perdidos

Por Pablo Peralta*

El 20 de enero de 2020 asumía en la Fábrica Argentina Aviones (FAdeA) el Directorio que hoy preside la empresa. La esperanza depositada en una nueva gestión, de raigambre nacional y popular, traía nuevos augurios con la expectativa de reactivar la empresa luego de 4 años de Gobierno Macrista que trajeron como consecuencia cientos de despidos y un desguace, no solo del capital humano sino de proyectos en curso iniciados post-reestatización.
Pero lo que se presuponia como una nueva etapa para la empresa terminó siendo una continuidad entre el Directorio que se iba y el que llegaba.
500 días han pasado desde aquel lunes 20 de enero y los cientos de trabajadores desvinculados de la Fábrica (por diversos motivos, principalmente ideológicos) aún seguimos esperando ser reincorporados.
Que primero fue la reactivación, luego la pandemia, después la aprobación del FONDEF y mañana será otra excusa.
El actual Directorio ya fracasó, dio muestras sobradas de su incapacidad de conducción, sensibilidad y falta de compromiso con el proyecto nacional.
¿Hasta cuándo desde Buenos Aires se seguirá pagando a dirigentes que jamás construyeron o en su defecto demostraron el escaso interés por lo colectivo?
Cobraron (y muy bien) durante 12 años, volvieron a recibir cargos y algunos tienen la caradurez de mostrarse en medios de comunicación con el afán de querer integrar listas legislativas.
¿Y de FAdeA tienen algo para decir? Bien, gracias.
Las reincorporaciones fueron una promesa de campaña, hoy en el olvido.
Ministro Agustín Rossi: Compañero, Usted es un gran conocedor de la política cordobesa, en más de una ocasión llegó a tierras mediterráneas para hacer campaña como precandidato a Presidente o bien para disertar sobre otras temáticas.
¿Se acuerda de una cosa?
Quienes siempre pero siempre estuvieron allí eran los trabajadores de FAdeA con una Bandera que decía “Orgullo Nacional”.
Jamás hubo un militante del PRO ni del radicalismo, esos que por ejemplo siguen en puestos jerárquicos en la empresa como gerentes o jefes, los mismos que ingresaban mientras se despedían a compañeros por demás calificados.
Los tiempos se acortan, cada día que pasa es uno perdido. La reactivación parece tan lejana como la promesa de reincorporaciones.
Empecemos con un nuevo proyecto a largo plazo y si es posible con un nuevo Directorio para la empresa. No cometamos los mismos errores del pasado por la soberbia de unos pocos.
FAdeA está en primer lugar, siempre.
*Licenciado en Ciencias Políticas