La Asociación Trabajadores del Estado (ATE-CTA) ostenta la Personería Gremial Nº 2 en el país y cuenta con 350 mil afiliados en todo el territorio nacional, con 95 años de historia construyendo dignidad para las y los trabajadores estatales, sean nacionales, provinciales o municipales.
Esta realidad es base y fundamento de la legalidad y legitimidad ATE tiene, fuera de toda discusión, para ejercer con orgullo la representación de las y los municipales en Córdoba, teniendo presencia en 100 ciudades y comunas de la provincia.
Este año 2020 crecimos en la representación del sector, a pesar de los impedimentos que supone la pandemia para toda actividad como fue de público conocimiento. No obstante se trató de un salto muy importante en las afiliaciones, tanto para la conducción provincial como para cada una de las seccionales que nos integran (Villa María, Río Cuarto, Río Tercero, Cruz del Eje, Adelia María, San Francisco).
La decisión de crecer entre los municipales es estratégica para ATE en todo el país, atento a que se trata del sector del Estado que vive peores condiciones, en términos de derechos vulnerados y salarios a la baja. En muchos casos esos haberes ni siquiera no alcanzan a superar la línea de la pobreza.
En ese contexto, el crecimiento organizativo entre los municipales no solo es cuantitativo sino cualitativo, apoyado en una campaña de afiliación exclusiva para los municipales, pensada desde la Secretaria de Prensa y Comunicación del Consejo Directivo Provincial.
Así hemos logrado creer en cantidad y en calidad, con una campaña pensada para promover y enamorar a las y los compañeros para que se sumen a nuestro sindicato. Quienes delegados y delegadas, o tienen unas potencialidad para serlo, cuentan para su defensa con un manual especialmente diseñado para capacitarse en la acción gremial, en lo político, y en lo institucional, para que cada representante sea la voz de ATE en la localidad.
En ese sentido, apuntamos tanto a la formación y capacitación como a las asambleas en tanto expresión de la voluntad del afiliado y la afiliada. Desde ATE no pensamos en salidas individuales, donde los cuadros dirigenciales se mueven a espaldas de las y los trabajadores, sino que entendemos que a partir de la asamblea, como herramienta de organización, de construcción y de lucha, apostando a la posibilidad de crecer y seguir conquistando derechos para este sector, que es el más precarizado de la cadena de trabajadores estatales.
Esta estrategia de organización también apunta a consolidar los derechos ya ganados, que algunos intendentes e intendentas pretenden desconocer, al comportarse como patrones de estancia frente al personal a su cargo. Son derechos fueron ganados en base al esfuerzo de generaciones de trabajadoras y trabajadores a costa de sangre, sudor y lágrimas. En consecuencia, crecer en afiliaciones y en organización en la garantía que esos derechos no serán vulnerados.
Negociación y salario
Cabe destacar que en las 100 localidades mencionadas, donde ATE se erige como representante de las y los municipales, nuestro gremio es el mayoritario y por eso llevamos adelante las negociaciones paritarias. Es decir, que estamos sentados frente a los departamentos ejecutivos para concretar las negociaciones salariales, de condiciones de trabajo en cada municipio, así como en lo referido al escalafón, la carrera administrativa, los suplementos por tareas riesgosas, el suministro anual de dos mudas de ropa de trabajo al año, etc.
En ATE la práctica gremial determina que los dirigentes deben estar permanentemente presentes en los sectores de trabajo, para construir desde la cercanía con cada una de nuestras afiliadas y afiliados. De esta forma, las políticas que definamos son consensuadas y acordadas en conjunto. Lo resaltamos para marcar la distancia con aquellas prácticas burocráticas de los dirigentes que una vez al mes van a la municipalidad para hablar con los funcionarios y terminan en esa instancia su representación sindical.
Asimismo, destacamos que en cada discusión salarial que tuvimos este año con los distintos intendentes de Córdoba siempre realizamos previamente una discusión con las y los trabajadores, para acordar cuál es el porcentaje de recomposición salarial debemos plantear ante el Ejecutivo.
Seguidamente, es la asamblea de trabajadores quien resuelve aceptar o no la oferta oficial, tratando de mantener incluidas las clausulas gatillos en estos periodos de fuerte inflación, abriendo las mesas de relaciones laborales con las autoridades dos veces al año mínimamente. Este año fue importante la gestión de los bonos navideños y de los bonos de salud, ahí donde los municipios no cumplían con la disposición nacional.
Además, para ATE siempre es imperioso que nuestras compañeras y compañeros tengan las condiciones de higiene y seguridad laboral cubierta por lo que es una problemática presente en toda mesa de relaciones laborales.
Por último, cabe señalar que no somos mejores ni peores que otras prácticas sindicales pero sí diferentes, tenemos una manera de construir organización desde la horizontalidad, desde abajo para arriba, donde tratamos de acordar y mantener canales de diálogo con la patronal. Pero si el diálogo no llega a buen puerto siempre están las instancias de negociación y de lucha sindical, de ser necesario, para lograr una vida digna para todas las trabajadoras y trabajadores municipales.
Fuente: www.atecordoba.org