Los trabajadores bancarios y el avance tecnológico

“La Reforma Laboral hace tiempo que está entre nosotros. De la mano de las nuevas tecnologías la organización del trabajo viene sufriendo modificaciones con la idea optimizar el servicio, bajar costos y aumentar las ganancias.

“En medio de todo esto, los trabajadores perdemos protagonismo frente a nuevas plataformas y sin la intervención de las mayorías de las organizaciones gremiales, terminamos siendo simples observadores de cual es lugar donde estos cambios nos van a ubicar.

“Sin duda el avance de la tecnología es imparable, la pregunta es por qué desde las organizaciones gremiales, en su mayoría cercanas al poder de turno, no previeron esto para poder intervenir a través de equipos técnicos, con la construcción colectiva de propuestas, donde el trabajador se sienta protagonista de los progresos y pueda ser beneficiado también por los avances.

“Cuando el trabajador empieza a percibir que puede ser reemplazado por las nuevas tecnologías y que las organizaciones sindicales no intervienen como debieran, se retrae y solo atina a mantener lo que le queda, olvida que él es parte fundamental de la generación de ganancias que les permiten a los empresarios acceder a las nuevas tecnologías.

“Las relaciones laborales se deterioran, el sálvese quien pueda se empieza a instalar y las burocracias hacen la vista gorda.

“En el sistema financiero estos cambios se producen casi a diario y tanto usuarios como trabajadores tenemos que adaptarnos a ellos pasivamente. Si bien, muchas de estas transformaciones trajeron beneficios a un sector minoritario de la sociedad, la gran mayoría de los usuarios se vio arrastrada sin la más mínima intervención. En el caso de los trabajadores no redundaron en un trabajo más placentero y creativo. Se redujo personal, sigue siendo una labor altamente estresante y se impuso tareas propias del sector a otros trabajadores, como la entrega de dinero en cajeros de súper mercados. El surgimiento de puntos de atención casi sin personal está dirigida a una élite de empresarios y comerciantes que constituyen una ínfima minoría de los usuarios.

“Desde SITEBA planteamos que es importante el desarrollo de la tecnología con el único objetivo de que los usuarios del sistema sean mejor atendidos y que los trabajadores desarrollemos nuestra jornada laboral en mejores condiciones.

“La implementación de tecnología debería producir menor estrés, más descanso, más capacitación, mejor salario, más derechos y una jornada laborar más placentera.
Mejores tecnologías deberían producir un servicio más cómodo, más accesible y en función de la mayoría del pueblo.
Hasta ahora nada de esto pasa y el único objetivo de este desarrollo tecnológico es acrecentar las ganancias de las patronales.

“Desde SITEBA planteamos con firmeza que sin la participación de los trabajadores los cambios tecnológicos solo traerán mayor precarización laboral, junto con convertirnos a los empleados en agentes pasivos desplazados por programas y sistemas y en meros vendedores de productos como en cualquier otro negocio.

“Sostenemos que el sistema financiero no se puede concebir como un negocio sino como un servicio público, por lo que toda inversión en tecnología debe redundar en mejoras en la calidad de atención para la mayoría del pueblo y mejoras en las condiciones laborales de nosotros, los trabajadores bancarios.

“Claro que esta pelea va íntimamente ligada a la lucha por una Nueva Ley de Entidades Financieras que ponga a la banca al servicio de las mayorías populares y el crédito para el desarrollo de un país más justo, económicamente independiente y soberano”, finaliza la declaración del Sindicato de Trabajadores y Trabajadoras de Entidades Bancarias y Financieras (SITEBA-CTA) que conduce José “Pepe” Peralta, Secretario Adjunto de la CTA Autónoma Capital.