“Las trabajadoras y trabajadores de la Salud de Córdoba nos pronunciamos en contra del brutal ajuste que está sufriendo el pueblo trabajador de conjunto.
“La inflación y la suba del dólar acentúan la crisis económica que sentimos no sólo en los bolsillos por las paritarias a la baja y los salarios por debajo de la línea de pobreza, sino también en el deterioro y vaciamiento de la Salud Pública, la falta de infraestructura, mantenimiento, personal e insumos básicos para poder brindar la atención que la población necesita y merece”, señala un comunicado gremial.
La Unión de los Trabajadores de la Salud de la Provincia de Córdoba (UTS-CTA), denuncia “una crisis en las condiciones hospitalarias en la provincia, precarización laboral, y los magros salarios”. Además, los trabajadores protestan contra el vaciamiento y por la incorporación de nuevo personal.
“Hay una sobrecarga del personal que trabaja en los hospitales públicos. Es muy difícil sobrellevar la demanda porque aumentó notablemente, tanto por la gente que está sin trabajo (que se quedó sin mutual y debe acudir al hospital público) como aquellos que lo hacen por primera elección. Realmente, vemos que está vulnerado el derecho de los cordobeses a tener acceso a la salud pública”, dijo Estela Giménez, Secretaria Adjunta de UTS.
En el plano económico, la dirigente destacó que los trabajadores del sector vienen perdiendo 30% del salario en relación a las cifras inflacionarias. Como ejemplo, Giménez graficó que “un enfermero monotributista en Salud cobraba hasta el mes pasado 14.000 pesos”.