La Asociación Cultural Israelita de Córdoba rechaza la visita de Netanyahu a Argentina

El presidente Javier Milei invitó oficialmente al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, a que visite la Argentina. Su llegada al país está prevista para septiembre de este año, pero aún no hay certezas de que eso suceda.

El embajador de Israel, Eyal Sela, declaró que aún «no hay fecha confirmada» y que la intención del principal político israelí es «devolverle la gentileza de la visita a Javier Milei». Sin embargo, desde el Estado sionista temen que Netanyahu sea detenido apenas pise suelo argentino.


Sucede que el primer ministro de Israel, desde noviembre de 2024, tiene un pedido de captura emitido por la Corte Penal Internacional (CPI), por su responsabilidad en crímenes de lesa humanidad contra el pueblo palestino. También pesa una orden de arresto sobre su ex ministro de Defensa, Yoav Gallant.


Con respecto a dichas órdenes, los jueces de La Haya indicaron haber encontrado “motivos razonables” para creer que Netanyahu y Gallant son responsables penalmente por el crimen de guerra de «hacer morir de hambre como método de guerra» y los crímenes de lesa humanidad de «asesinato, persecución y otros actos inhumanos». Además, los acusan por dirigir intencionalmente ataques contra la población civil.

Ek miéercoles pasado, hubo una dura respuesta diplomática por parte de EE. UU. Por pedido de Donald Trump, el Departamento de Estado anunció sanciones contra cuatro jueces y fiscales de la Corte Penal Internacional, por pedir la detención de Netanyahu. Los acusa de “abuso de poder y politización”, “amenaza para la seguridad nacional” e instrumento de “guerra jurídica contra Estados Unidos y su estrecho aliado, Israel”.

Mientras tanto, Milei permanece como uno de los únicos mandatarios que aún respalda el accionar de Netanyahu a pesar de sus crímenes de guerra contra el pueblo palestino. Y como muestra de su subordinación, firmó un acuerdo para intentar mejorar las relaciones diplomáticas entre Israel y países como Uruguay, Panamá y Costa Rica.

“No en nuestro nombre”

En nuestra provincia, la Asociación Cultural Israelita de Córdoba (ACIC) se posiciona abiertamente en contra de la visita de Benjamín Netanyahu y pide que otras organizaciones judías se expresen también en rechazo del gesto geopolítico de Milei.

«Repudiamos el genocidio y la limpieza étnica que el gobierno de Israel está perpetrando en la Franja de Gaza. Es terrible que hayan bombardeado escuelas, hospitales, universidades y que, sobre eso, ahora dejen sin alimentos ni agua a niños, mujeres y civiles. Creemos que la gente tiene que reaccionar ante esto: no puede ser que estemos viendo un genocidio por televisión», sostuvo Esther Galina, presidenta de la institución.

Si bien condenan contundentemente las acciones perpetradas por Hamas el 7 de octubre de 2023, eso no les impide remarcar que «nada justifica los crímenes que el gobierno de Israel está cometiendo» en Gaza y Cisjordania.

ACIC se describe como una institución laica, humanista, progresista, antidiscriminatoria, antifascista y antipatriarcal. Fue fundada en 1949, a partir de la fusión de la Biblioteca Juvenil Israelita (1913) y la Unión Juvenil Israelita (1946), con la intención de ser una colectividad activa e integrada a la sociedad cordobesa en la que vivía.

«Nosotros somos y nos sentimos argentinos, no estamos vinculados al gobierno de Israel (…) Hay buena parte del pueblo israelí que también está en contra de esta guerra. Hay persecución también dentro del Estado de Israel, donde no hay libertad de expresión. Se trata de un gobierno de derecha que no representa el sentir de todo un pueblo y menos de toda una religión», agregó Galina en diálogo con La tinta.


Para ACIC, que también integra el ICUF (Federación de Entidades Culturales Judías de la Argentina) y el EIAJ (Espacio Internacional Antifascista Judeo-Progresista), la solución definitiva para el conflicto palestino-israelí es «dos pueblos, dos Estados», en los territorios establecidos antes de 1967.

«Los pueblos merecen sus propios Estados soberanos, con territorios claramente enmarcados, donde puedan desarrollar sus vidas con tranquilidad», concluyó la entrevistada.

Imagen de tapa: Ojo Obrero Fotografía, Ana Fraile y colaboradores

Fuente: www.latinta.com.ar