“Es un gran esfuerzo de la militancia sanitaria para instalar la Agenda de Salud”

Más de 100 organizaciones y espacios vinculados a la salud redactaron 15 puntos base de un acuerdo para instalar la agenda sanitaria del campo popular en el proceso electoral. “Hay que revertir el deterioro de las políticas públicas y que la Secretaría vuelva a ser Ministerio”, expresó Daniel Godoy, de IDEP-ATE.

Representaciones sociales y sanitarias del campo popular se reunieron hace unos días en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA) para redactar las bases de un acuerdo multisectorial a favor del derecho a la salud en Argentina.

De cara al proceso electoral de agosto y octubre, la convocatoria tuvo como objetivo instalar la agenda sanitaria del campo popular para revertir la actual situación de deterioro de las políticas públicas de saludAdemás, los participantes consideraron necesario comenzar a marcar un rumbo en la recuperación de derechos en el plano social y sanitario.

En este encuentro participaron Rodolfo Arrechea, miembro del Consejo Directivo Nacional de ATE, y el director del IDEP-Salud (Instituto de Estado y Participación, de ATE), Daniel Godoy. En diálogo con Canal Abierto destacaron la importancia de estos 15 puntos por el derecho a la salud.

“Este es un gran esfuerzo de la militancia sanitaria para instalar la agenda de salud en el debate electoral. La desjerarquización del Ministerio representa la pérdida de capacidad del Estado para garantizar derechos, por eso el primero de estos 15 puntos es que Salud debe volver a ser un Ministerio”, señaló Godoy.

Las más de 100 organizaciones acordaron la redacción de 15 puntos. El principal fue el nombrado por el director de IDEP. Además se destacan la derogación de la CUS, la reincorporación de los despedidos, implementar cabalmente la Ley de Salud Mental, la atención digna para los adultos mayores, y ampliar el Presupuesto Nacional, entre otros.

“Se han multiplicado las agresiones a trabajadores porque parte de la población cree que la respuesta está en las ventanillas y no en las políticas públicas que implementa el Gobierno nacional. Cuando Macri asumió en la Ciudad de Buenos Aires arrancó con un presupuesto histórico que habíamos conseguido con mucha organización y pelea del 23,6% destinado para la salud, uno de los porcentajes más altos de la región. Hoy sólo tenemos un 15,7%, más bajo incluso que durante la dictadura”, remarcó Arrechea.

Por su parte, Godoy sentenció: “Todo se reduce a una sola tensión: la salud como derecho versus la salud como mercancía. Hay un proceso de reforma del sistema de salud en Argentina, dictaminado por los organismos de crédito supranacionales. Se inició en los 90 con las primeras bases que consolidan un modelo de aseguramiento. Macri produce una aceleración de ese proceso, donde ya no está garantizado el derecho a la salud plena, sino que se da en el marco de la oferta y la demanda, en base a lo que uno pueda pagar para acceder a mejores servicios”.

Fuente: www.canalabierto.com.ar