Se elevará el informe a las autoridades para exigir las medidas correctivas necesarias, y hasta entonces el sector se mantiene en estado de alerta.
“ANDIS viene siendo manoseado desde hace larga data, comenzó con el desguace durante el ‘Macrismo’, a partir de los despidos y los traslados arbitrarios que sufrieron en Río Cuarto, desde la sede que tenía el organismo a una oficinita en ANSES. Tras la pandemia, recién hace un mes y medio que los convocaron a la presencialidad y ahora funciona en un rinconcito de un vagón en el Complejo de Estaciones de tren de Río Cuarto, en un espacio que corresponde a la Defensoría del Pueblo de la ciudad. Un lugar que claramente no se encuentra en condiciones para ser utilizado como oficina pública, y menos de un organismo con alta demanda de atención, porque no cuenta con espacios ni comodidades ni conexión, no tiene una sala de espera, la gente debe esperar a la intemperie”, explicó Matías Giuliani, integrante de Salud Laboral de ATE.
“Relevamos estas pésimas condiciones de medio ambiente de trabajo, no solo hablando de las condiciones edilicias sino todo aquello donde deben desempeñarse los compañeros, amparando y resguardando a la gente sin tener los medios necesarios para hacerlo de la forma que corresponde”, concluyó.
Posteriormente se elevará el informe a las autoridades para exigir las medidas correctivas necesarias, y hasta entonces el sector se mantiene en estado de alerta.
Fuente: www.atecordoba.org