Las organizaciones que coordinan estos puntos de contención aseguran que a diario reciben pedidos de ayuda para la apertura de nuevos centros comunitarios en los barrios.
Por su parte, Silvia Alcoba, Secretaria General de la CTA Autónoma Regional Río Cuarto y coordinadora del Movimiento de Acción Popular (MAP-CTA), aseguró: “Todos los días recibimos pedidos, en nuestra página de facebook, de familias que solicitan ayuda para los chicos, que los ven en la calle y no tienen para darles ni un pedazo de pan duro”.
Del mismo modo, explicó: “En las comunicaciones nos consultan sobre cómo organizarse para abrir un merendero, pero nosotros como agrupación no podemos abarcar más puntos, porque no tenemos cómo ayudarlos”.
En este contexto, Alcoba indicó que la semana que viene tendrán una reunión con miembros del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, con quienes el año pasado ya realizaron gestiones. “Esperamos recibir algún tipo de ayuda para las copitas que tenemos funcionando actualmente y las que podamos ayudar”, dijo.
– ¿Qué tipo de ayuda solicitarán?
– De vez en cuando nos mandan mercadería desde la Nación, un camión cada 6 meses, por lo que no podemos garantizar la apertura de nuevos espacios. Es por eso que nosotros apuntamos a las donaciones que podamos recibir y la autogestión, estirando todo como chicle para poder entregar lo que tenemos. Si nos llegan a garantizar la entrega de un camión cada dos meses, la situación puede ser distinta y podamos hacer un mejor trabajo.
En la actualidad, el MAP, organización fundante de la Federación Nacional Territorial (FeNaT-CTA), cuenta con 22 copas de leche que funcionan con normalidad como lo hacen durante el año, mientras que de estas, 10 entregan el almuerzo. “Nos fijamos en qué barrios había más necesidad y allí decidimos empezar con los comedores, porque hacerlo en todos los merenderos es imposible”, señaló Alcoba.
Consultada sobre la posibilidad de armar una red de merenderos y así enfrentar la dura realidad de manera conjunta, la responsable del MAP indicó que esa fue una experiencia que se intentó llevar adelante, pero fue un proyecto que se vio damnificado por las aspiraciones políticas de cada espacio. “Es una decisión que hemos tomado quienes no nos articulamos políticamente con el Estado Municipal, y terminamos recibiendo menos aportes que otras”, dijo, y señaló que entre los proyectos está realizar un censo y mapeo de las copitas de leche y comedores comunitarios, para evaluar en qué sectores hace falta incorporar nuevas.
“Una vez realizado el relevamiento sí podremos definir quién puede trabajar en los sectores más próximos”, explicó Alcoba, quien consideró que el 2019 será particular por ser un año electoral. “Pienso que en este momento se activarán los recursos para las copitas hasta que pasen las elecciones, nosotros tenemos la definición desde hace 4 años que una vez que se activan los merenderos, se deben mantener”, completó la referente social.
Explicaron que esperan una situación complicada para la época del inicio de clases, cuando se necesiten todos los útiles escolares y muchos niños no empiecen la escuela por no contar con los elementos requeridos.