Ríos: “La pandemia puso en evidencia la necesidad de las telecomunicaciones”

Clases virtuales, teletrabajo, plataformas de series y películas, redes sociales, etcétera. Las telecomunicaciones se volvieron fundamentales para el desarrollo de la vida y la economía durante el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO). A las empresas comunmente se las conoce desde la posición como consumidores, por ejercer su poder de manera arbitraria en un mercado altamente concentrado; sin embargo se desconoce la situación de sus trabajadores.

Por eso, desde el Equipo Gremial de la CTA Autónoma Capital entrevistaron a Juan Carlos Ríos, trabajador de Telefónica-Movistar, quien dio cuenta de las condiciones salariales y laborales durante el ASPO, la actuación del oficialismo de CEPETEL y la posición de los trabajadores profesionales de las telecomunicaciones en la CTA Autónoma.

-¿En qué medida los profesionales de las telecomunicaciones son esenciales?

-En el inicio del presente siglo, desde los países centrales en el desarrollo de las tecnologías de la información y comunicación, con el avance en la capacidad de la banda ancha, la que comúnmente denominamos internet, exponían que era posible transplantar tecnología, desde tales países hacia cualquier otro del mundo, con la sola necesidad que algunos operarios armaran el rompecabezas de hierro y circuitos electrónicos en el país receptor.

Los ensayos de esto, demostraron que era necesario que personal capacitado, con formación y experiencia en tales equipos, con el conocimiento de la geografía local, fueran, necesariamente, los integradores de las distintas partes de esa tecnología importada.

Tal capacitación, formación, experiencia, solo se consigue con años de desarrollo profesional de los trabajadores y trabajadoras que llevarán adelante el proceso inicial de integración, luego el de la operación y mantenimiento, adecuando, de manera periódica, una red de tecnología de la información y comunicación a las necesidades de un momento dado.

-¿Qué perspectivas ven para su actividad en los próximos meses de 2020?

-Las telecomunicaciones han sido declaradas un actividad esencial y nosotros, como trabajadores, desarrollamos actividades esenciales, en los términos de la normativa nacional en este tiempo de pandemia. Creo que esta situación inédita que ha planteado la pandemia por el COVID-19, en la mayoría de los países, puso en evidencia la necesidad de las telecomunicaciones, al punto tal de volverlas casi imprescindibles para continuar manteniendo una actividad productiva, el vínculo personal, aunque no sea en persona, en la humanidad. Por lo cual, considero que la actividad se mantendrá en un ritmo creciente, no exponencial, pero si con una linealidad sostenida. Y con una necesaria expansión aún, hacia sectores de la población, en Argentina, en el mundo, que por razones de orden económico no pueden acceder con facilidad a una conexión que los vincule al medio de las tecnologías de la información y comunicación (TIC).

-¿Cómo ha afectado la pandemia al trabajo?

-De diversas maneras. Los compañeros y compañeras que hacen mantenimiento de plantel exterior, con los elementos de protección personal específicos por el COVID-19 (EPP COVID) mantienen un ritmo de trabajo casi inalterado. Andar con el barbijo / tapa boca a cuestas, ya es una afectación.

En Telecom-CableVision, una de las pujas entre FOETRA y SAT-SAID, fue que éste último sindicato, negoció con la empresa el ingreso de su personal representado a los domicilios de los usuarios. Lo que FOETRA en un primer momento había acordado con, al menos Telefónica-Movistar, y luego por una rebelión de sus representados y representadas, dio marcha atrás para finalmente acordar con la empresa el no ingreso a los domicilios de los usuarios y generar las reparaciones solo en el plantel exterior o las instalaciones mediante indicaciones a los usuarios.

Quienes operan y mantienen el servicio TIC a través del software, los programas, que controlan a la red, con la remotización necesaria de sus puestos de trabajo en los edificios de la empresa, pueden continuar desarrollando sus tareas. Les surgen limitaciones, dadas por el ancho de banda disponible en sus domicilios, las prestaciones de las computadoras dadas por la empresa, como una herramienta de trabajo y que no tienen la capacidad suficiente para hacer en simultáneo tareas que antes hacían con más de una computadora.

Aún no habiendo sido un escenario buscado por la empresa, lo aprovecha para reducir gastos: mantenimiento de los edificios; energía; la posibilidad de reducir activos en edificios propios o alquilados.

Por otro lado, lo no presencial, en los distintos grupos laborales, básicamente impacta en la inmediatez y simultaneidad con la cual se puede establecer un intercambio de opiniones entre compañeros.

-¿Cómo eran las condiciones salariales antes de la pandemia y ahora?

-Tomando en cuenta que la paritaria salarial 2019-2020 venció el 30 de junio, para el caso de Telefónica-Movistar solo se “otorgó” una suma fija, adelantada el 11 de septiembre.

En Telecom-CableVisión no parece haber de momento disposición de la empresa a lograr un acuerdo de recomposición salarial. Ante un preanuncio de medidas de fuerza, el Ministerio de Trabajo dictó conciliación obligatoria el pasado 10 de septiembre.

La discusión paritaria está dada entre la MUS (Mesa de Unidad Sindical, conformada por los sindicatos del sector – excluyendo el SAT-SAID -, de la que participa el CEPETEL) y las empresas.

-¿Qué les plantean las empresas a los profesionales de las telecomunicaciones que están descontentos con sus condiciones y salarios?

-En cuanto a Telefónica-Movistar: entre los representantes informales de la empresa, gerente, directores y la masa de trabajadores, trabajadoras, no hay ámbito donde, con alguna posibilidad cierta que llegue al área de recursos humanos, se pueda discutir sobre la situación salarial.

Algo similar es respecto a las condiciones de trabajo. Estos meses de ASPO tienen la particularidad que pudimos reunirnos, virtualmente, con estos representantes de la empresa más veces que en tiempos previos, de manera segmentada por conjunto de grupos laborales. El reclamo más escuchado (leído) fue por el envío de la silla ergonométrica al domicilio particular.

Lo que hasta hace poco era un pedido de reducción horaria, quizás ahora se vea compensado con el trabajo desde el hogar. Al menos hasta que ésta modalidad incluya el control de la conexión del trabajador y trabajadora a la empresa; trasladando así la supervisión formal o informal del trabajador o trabajadora que antes concurría a su lugar de trabajo.

-¿Cómo juzgan desde los trabajadores de CEPETEL en la CTA Autónoma el desempeño de la actual dirección del sindicato?

-Considero que la actual dirección muestra un fenómeno frecuente en la política, cualquiera sea su campo de aplicación, la contradicción entre ideología y la acción, o política en sí.

No todos los integrantes de la dirección se identifican con el peronismo, y en particular con el kirchnerismo, pero sí los principales, los que “conducen a la dirección”.

Sin embargo, en la política que llevan adelante, desde el 2015 en que asumieron como conducción central del sindicato, paradójicamente su eje es una reproducción en el campo gremial de la política del macrismo, primero en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, luego a nivel nacional.

Denuncias soslayadas de corrupción en las conducciones previas.

Sometimiento a las políticas desarrolladas por la MUS (Mesa de Unidad Sindical), que en realidad lo es de la conducción de FOETRA, bajo el pretexto de la unidad sindical.

Visión que la conducción de sindicato la deben llevar adelante trabajadores, trabajadoras de una determinada empresa, y no trabajadores, trabajadoras, sin diferenciar en cual empresa desarrollan su actividad laboral; porque el sindicato es de los trabajadores, trabajadoras, no de las empresas. Es posible que esto evidencie que los compañeros, compañeras de la actual conducción se identifican más con la empresa donde trabajan que con el universo de trabajadores, trabajadoras, con independencia de estas.

En cuanto a los afiliados al sindicato, no hubo crecimiento. Si hay un decrecimiento consecuencia de los retiros voluntarios, o no, sin ser despidos, llevado adelante por Telefónica-Movistar y Telecom-CableVisión.

-¿Qué actividades están desarrollando desde los trabajadores profesionales de las telecomunicaciones referenciados en la CTA-A?

-Hay que hacer notar que en cuanto a la disposición de los profesionales empleados en las empresas con respecto a la sindicalización, mayoritariamente y en el mejor de los casos le resulta indiferente.

De todas maneras, con cierta frecuencia se desarrollan comunicados hacia los afiliados y afiliadas del CEPETEL. Se mantienen también contactos con integrantes de otros “gremios telefónicos” aunque mas bien, de manera personal e informal.

Se vienen planteando algunas diferencias con la dirección actual del sindicato, que además acata a rajatabla lo marcado por la MUS:

– Reivindicación salarial. La principal es discusión de porcentajes. No suma fija. Luego se verá cual es tal porcentaje, tomando en cuenta la espiral inflacionaria en la que entramos a partir de la ASPO y el desfasaje salarial que ya se arrastraba con la paritaria 2019-2020.

– En cuanto a condiciones de trabajo. No hay una discusión abierta sobre el particular.

Fuente: www.ctacapital.org