La pobreza, que en el país alcanza al 32% de la población, en la ciudad es del 25,3%
Representa el 16,9% del total de hogares de Villa María. Es la primera vez que se conoce este dato.
La pobreza alcanza al 25,3% de la población local, mientras que el 3,5% de las personas que habitan Villa María se encuentra en situación de indigencia.
Indicadores que no se relevaron con la primera Encuesta Trimestral de Hogares (ETH) se incorporaron en las siguientes, tal como se había prometido desde el Gobierno encabezado por Martín Gill. Y se conocieron ayer.
La medición de pobreza con el método de la “línea de la pobreza” consiste en establecer, a partir de los ingresos de los hogares, si estos tienen capacidad de satisfacer -por medio de la compra de bienes y servicios- un conjunto de necesidades alimentarias y no alimentarias consideradas esenciales.
Para calcular la línea de pobreza se cuenta con el valor de la Canasta Básica Alimentaria y se amplía con la inclusión de bienes y servicios como vestimenta, transporte, educación y salud, entre otros, para obtener el valor de la canasta básica total.
En tanto, el concepto de línea de indigencia procura establecer si los hogares cuentan con ingresos suficientes como para cubrir una canasta de alimentos capaz de satisfacer un umbral mínimo de necesidades energéticas y proteicas. Los hogares que no superan esa línea son considerados indigentes.
En este sentido, la secretaria de Unidad Intendencia, Celeste Curetti, hizo hincapié en que gran parte de la población local tiene acceso al gas, agua y cloacas.
Hogares y personas
“Siempre son más personas que cantidad de hogares” los que se encuentran en estas situaciones, indicó la secretaria de Economía Daniela Lucarelli, advirtiendo que “por lo general” se trata de viviendas en las que viven varios integrantes.
De acuerdo a información del Centro Estadístico, la pobreza alcanzó al 16,9% de los hogares de la ciudad (y como se dijo más arriba, al 25,3% de las personas), mientras que el 2,2% de los hogares resultó indigente (y el 3,5% de las personas).
En otros lugares
Lo que dicen los números, que representan a muchísimos vecinos y vecinas que quedan al costado del camino, confirman altos índices de pobreza para la ciudad, la que es más baja que en otros lugares, lo que da cuenta de un contexto un poco más benévolo.
En Argentina, según el último informe del INDEC, la pobreza abarca al 32% de la población. En la región pampeana es del 32,1%, en el Gran Córdoba es del 36,5% y en Río Cuarto, 29,3%.
También según el INDEC, la indigencia alcanzó al 6,7% de la población argentina; al 6,5% en la región pampeana; al 7,9% del Gran Córdoba y al 4,2% de Río Cuarto.
Ante la consulta, Lucarelli confirmó que todos los indicadores que son negativos (pobreza, desocupación, indigencia) empeoraron con el correr de los meses de 2018. Esto sucedió en consonancia a lo que se dio a nivel país de la mano de una grave crisis económica.
| Según el último informe del INDEC, en la Argentina la pobreza abarca al 32% de la población. En la región pampeana es del 32,1%; en el Gran Córdoba, 36,5%, y en Río Cuarto, 29,3% |
Se sumaron nuevas variables de medición
En la última ETH se agregaron nuevas variables de medición. A los datos sociodemográficos -como tasa de empleo y desocupación- se sumaron las mediciones de condiciones de vida y de seguridad y victimización.
Se indicó ayer -al igual que el año pasado, cuando se presentó en sociedad el Centro Estadístico municipal- que para las mediciones se utiliza la misma metodología que lleva adelante el INDEC y la Dirección de Estadísticas de la Provincia, por lo que el portal ofrece la posibilidad de comparar los datos locales con los de los 31 conglomerados urbanos que mide el instituto nacional.
Qué incluye
En el apartado Condiciones de Vida se incluyen los índices de pobreza e indigencia, las características de la viviendas, si son propias, alquiladas o bajo otra modalidad, conexiones a los servicios básicos y tecnológicos.
En lo que hace a seguridad y victimización, los datos relevados por los encuestadores hacen a prevalencia de delitos de diferentes tipos, si fueron denunciados o si se omitió la presentación policial, el desempeño de las distintas fuerzas públicas y de la Justicia.
Este aspecto hace referencia a la sensación que la persona percibe en relación a esos indicadores.
En la presentación de ayer se conoció, por ejemplo, que existe una alta tasa de no denuncia de los delitos contra personas, que llega al 52,6%.
Son personas que contaron haber sido víctimas de algún delito contra su persona y nunca acudieron a los organismos a denunciarlo.
Dato objetivo
Todos los indicadores que reflejan cuestiones negativas para la ciudadanía empeoraron con el correr de los trimestres, confirmó ayer Daniela Lucarelli.
Evidentemente con un cuarto de la población en situación de pobreza y una desocupación que creció respecto a lo que estableció la primera ETH, nada hay para celebrar.
Sí se puede rescatar la decisión de un Gobierno que, en el último tramo de su mandato y en un año electoral, decidió relevar un abanico de variables y luego exhibir los resultados, no esconderlos.
Hasta ayer, hablar de pobreza en Villa María se trataba de percepciones. Ahora hay un dato objetivo, lastimoso, pero provechoso si se lo quiere revertir, cruzada difícil en un país en llamas gobernado por un equipo que fracasó.
Fuente: Diego Bengoa; www.eldiariocba.com.ar