El INDEC estimó que en agosto los salarios subieron un 21,9 % en relación al mismo mes del 2017 mientras que la suba de precios fue de 34,4 %. Una diferencia de 12,5 puntos. Crudo invierno para los trabajadores.
Por Mónica Arancibia
Otra vez fin de mes, cada mes que pasa es más difícil llegar con algo de salario en el bolsillo y no es una “sensación”. El INDEC lo confirmó con sus datos de Índice Salarios de agosto que mostraron que los salarios totales subieron 2,8 %, mientras la inflación aumentó en el mismo mes 3,9 %. En agosto todos los sectores perdieron ante la escalada de precios.
En el caso de los trabajadores registrados el incremento de los salarios fue de 2,9 % con respecto al mes pasado, mientras que para los trabajadores informales fue de 2,6 % y para los empleados públicos el alza fue del 3,0 %.
La situación es más crítica si se analiza el acumulado del año. El Índice de Salarios total aumentó en los últimos 12 meses de 21,9 %, pero la inflación en el mismo período fue de 34,4 %, es decir que los salarios quedaron 12,5 puntos por debajo de la suba de precios. Para los empleados públicos en el último año sus salarios crecieron 21,2 %, es decir 13,2 % por debajo de la inflación.
De total, en el sector registrado el aumento de los salarios fue de 22,8 % en el mismo período y en el sector informal la suba fue más baja del 18 %. Los trabajadores más vulnerables (empleo no registrado) tuvieron remuneraciones 16,4 puntos por debajo del aumento de precios.
Luis Campos, especialista del Observatorio del Derecho Social de la CTA – Autónoma afirmó “que en agosto el salario real siguió profundizando su caída. El sector privado registrado pierde un 7,9 % interanual y el sector público un 9,9 %”. Pero lo peor aún está por venir “Septiembre y octubre van a empeorar aún más esos retrocesos” agregó.
Luis Campos@luiscampos76
Datos frescos del INDEC: en agosto el salario real siguió profundizando su caída. El sector privado registrado pierde un 7,9% interanual y el sector público un 9,9%. Septiembre y octubre van a empeorar aún más esos retrocesos
Un informe del Observatorio de la CTA advirtió que en todos los sectores “de no mediar una reapertura generalizada de las negociaciones salariales, el retroceso de los ingresos de los trabajadores y las trabajadoras durante el 2018 será el más importante desde la crisis de 2002”.
El documento señaló que hubo una caída significativa de las remuneraciones de entre el 4 % y el 23 % en comparación con los valores registrados en el año 2015.
La inflación no da tregua
Los salarios se erosionan y la situación se agravará los próximos meses porque la inflación sigue en ascenso. Según estimaciones de consultoras el índice de precios al consumidor rondará entre el 5 % y el 6 % en octubre.
Según la consultora Elypsis, la inflación de octubre fue del 6 % y estimó que la suba en alimentos sea mayor al promedio, alrededor de 6,5 %.
En tanto, la consultora EcoGo, calculó un aumento de precios de 5,8 %. Federico Furiase, director asociado explicó al diario La Nación que el aumento es por el “arrastre alto que dejó alimentos en septiembre, porque se aceleró en las últimas semanas del mes”, y por los aumentos de tarifas de la medicina prepaga, transporte y gas.
EcoGo proyectó para 2018 una inflación de 49 %. Furiase agregó que “suponiendo salarios en 30 %, con reapertura de paritarias, el salario real este año cae 12,8 %”.
Por su parte, un informe del Instituto de Trabajo y Economía de la Fundación Germán Abdala (ITE) advirtió que el traspaso del aumento del dólar a los precios aún no ha finalizado y, que la inflación permanecerá en niveles muy elevados en los próximos meses por varios factores.
Uno de los motivos es que la inflación núcleo está por encima del nivel general, y esto significa que el aumento de precios se debe más a factores permanentes que estacionales o de productos y servicios regulados.
ITE explicó que “luego de la devaluación del tipo de cambio en diciembre de 2015 la inflación núcleo demoró entre 7 y 8 meses en volver a la tasa promedio del semestre previo al alza del tipo de cambio”.
Además, las subas de las tarifas de los servicios públicos es otro ajuste que presiona al aumento de la inflación. En octubre afectará el incremento de combustibles, transporte público de pasajeros, prepagas y gas. Además, en noviembre se convocó a audiencia pública para aumentar los servicios de agua y cloacas.
Otro elemento que adelanta la inflación por venir es el aumento de los precios mayoristas, que tuvieron una suba muy por encima de los minoristas. Entre mayo y septiembre de 2018 el Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) más que duplicó a la del IPC (Índice de precios al consumidor) (20,8 % vs 46,0 %). ITE indicó que “este comportamiento indica que los comercios no han trasladado aún la totalidad del impacto de la devaluación a los precios minoristas”.
Según el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, en noviembre comenzará la recuperación del salario real con la reapertura de las paritarias en algunos sectores. Lo cierto es que el Gobierno buscará que los salarios cierren el año por debajo de la inflación para garantizar a las patronales salarios más baratos.
El salario se erosiona y el ajuste se profundizará con la aprobación del Presupuesto 2019 a pedido del FMI. Ayer se reunió el Consejo Directivo de la CGT pero no se anunció la fecha de un nuevo paro general, decidieron pasar a un cuarto intermedio hasta el jueves de la próxima semana.
Pero los trabajadores ya no pueden esperar más, es necesario un nuevo paro donde se volverá a demostrar la fuerza de la clase trabajadora en las calles. Contra el saqueo al salario hay que luchar por la reapertura de las paritarias para recuperar lo perdido en los últimos dos años con una cláusula gatillo trimestral y un salario mínimo igual a la canasta familiar, hoy estimada en $ 33.131 por los trabajadores de la Junta Interna Ate Indec.
La primavera llegó hace rato, pero para la mayoría del pueblo trabajador se transita aún un crudo invierno. Hay fuerzas para derrotar los planes de Cambiemos.
Fuente: www.laizquierdadiario.com