El Secretario de Seguridad de la Provincia de Córdoba, Alfonso Mosquera, volvió a defender los operativos de Gendarmería Nacional que fueron fuertemente cuestionados por organismos de Derechos Humanos y en diálogo con Telediario dijo que también se harán en Río Cuarto.
El polémico funcionario defiende las políticas de control social e intimidación a la población a través de operativos de las fuerzas de seguridad avalado en acuerdos firmados por la provincia con el Ministerio de Seguridad de la Nación que comanda la campeona de la “mano dura” y facilitadora del “gatillo fácil” Patricia Bullrich.
Mosquera, paladín de la “Doctrina Bullrich” en Córdoba, exhibe un pasado sinuoso donde ha sido protagonista de resonantes hechos ventilados por la crónica policial.
Hace doce años, entre noviembre de 2006 y marzo de 2007, Alfonso Mosquera saltó a la tapa de los diarios de todo el país, cuando se supo que fue uno de los 15 golfistas que acompañó a Marcelo Macarrón -viudo y único imputado por el asesinato de Nora Dalmasso, causa que ha tomado nuevo impulso en los últimos días- a jugar al golf a Punta del Este el fin de semana en que se cometió el femicidio de la mujer.
Mosquera volvió a los diarios en junio de 2013, cuando su ex esposa, Silvana Masoero se suicidó. Hacía dos años que la pareja se había divorciado y el hombre –gracias a sus conexiones políticas- logró quedarse con la tenencia de sus hijos, lo cual sumió en una profunda depresión a la mujer. Silvana Masoero era una de las mejores amigas de Nora Dalmasso.
Hijo del juez menemista José Mosquera, el flamante Secretario de Seguridad llegó a ser legislador provincial por el Departamento Río Cuarto de la mano del ahora dirigente de Cambiemos, Luis Juez. Una vez atornillado a su banca, se convirtió en un tránsfuga y saltó al pejotismo de José de la Sota.
Luego de su salto político al Delasotismo, Mosquera fue premiado con diferentes cargos en el Gobierno de Córdoba: Como Procurador del Tesoro, primero; y luego como director de la Agencia Córdoba de Inversión y Financiamiento (ACIF). Ahora es Secretario de Seguridad en reemplazo de Diego Hak, quien dio un paso al costado en medio del Rapozagate.
El Hambre es un Crimen
La Central de Trabajadores de la Argentina (CTA Autónoma) de la Provincia de Córdoba, renueva su repudio ante la criminalización y judicialización de la protesta y alerta que “la escalada represiva se profundizará a medida que crezca y se expanda el conflicto social en el marco de la resistencia popular contra las políticas de hambre, saqueo y entrega del Gobierno Nacional de Mauricio Macri”.
“Medidas que son acompañadas por el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, uno de los socios preferenciales de la Liga de Gobernadores garantes del Pacto de Gobernabilidad del Ajuste”, sostiene un comunicado de prensa de la Central cordobesa.
Para la CTA-A “el hambre es un crimen; por eso la primera medida de seguridad que reclamamos a los gobiernos de Macri y de Schiaretti, es que nuestros chicos coman, que tengan asegurada su alimentación diaria y que no se nos mueran de hambre en una provincia y en un país cuya principal producción es la fabricación de alimentos”.
Ilustración: Carlos Julio Sánchez
Fuente: www.alcatrazrevista.com