En el Gran Córdoba habría el doble de desocupados que a comienzos de año

  • Habría alrededor de 75 mil desocupados más respecto de los 70 mil que había a fines de 2019.
  • Según un cálculo de la Bolsa de Comercio, la tasa de desempleo llegaría en la actualidad al 19,6%.
  • Sería la mayor magnitud de ese indicador desde hace 17 años.

La Encuesta de Indicadores Laborales (EIL), que todos los meses elabora el Ministerio de Trabajo de la Nación, mostró ayer que el nivel de empleo registrado en el sector privado durante abril se redujo 3,1 por ciento a nivel nacional y 4,1 por ciento en el Gran Córdoba, con respecto al mismo mes de 2019.

Es uno de los tantos números que están dando testimonio de la gravedad de la crisis que está viviendo la Argentina por los efectos del aislamiento para prevenir la pandemia de Covid-19.

Por ejemplo, de los datos del Boletín de Seguridad Social de la Afip se desprende que en abril se perdieron a nivel nacional unos 111 mil puestos de trabajo formales, es decir, una caída del dos por ciento en relación con la cantidad de empleos registrados que había a fines de 2019.

Un estudio elaborado por la Bolsa de Comercio de Córdoba estima que, con la misma base de comparación, el empleo asalariado informal y los cuentapropistas se habrían reducido 21 por ciento.

Nacional y local

El resultado: “Combinados estos factores, el efecto inmediato de la crisis habría significado pasar de una tasa de desempleo nacional de 8,9 por ciento, observada en el cuarto trimestre del año pasado, a 18,3 por ciento en la actualidad”, subraya el informe.

En el Gran Córdoba, de acuerdo con el cálculo de la Bolsa, la tasa de desempleo se ubicaría en 19,6 por ciento en el inicio del segundo trimestre, más del doble del 9,5 por ciento del cuarto trimestre del año pasado y que es el último dato oficial disponible (el INDEC aún no dio a conocer las cifras del primer trimestre de 2020), para comparar con un período previo a la aparición del COVID-19.

De todos modos, es usual que por factores estacionales la desocupación baje hacia el final de cada año. En este marco, si la comparación es con respecto a un año atrás, el aumento de la desocupación sería menor, ya que en el segundo trimestre de 2019 la tasa había trepado al 13,1 por ciento.

Lo real es que esta tasa de casi 20 por ciento sería la mayor en 17 años, puesto que hay que retrotraerse hasta el primer trimestre de 2003 para encontrar un valor superior: 23,6 por ciento.

A valores reales, unas 145 mil personas en el Gran Córdoba estarían sin trabajo: poco más del doble de las 70 mil que estaban en esa situación a fines de 2019 y casi un 50 por ciento más que las 100 mil que se relevaron en esa condición entre abril y junio del año pasado.

Más informalidad

“El impacto es mayor en Córdoba debido a la mayor informalidad, que antes de la pandemia afectaba al 43 por ciento de los asalariados”, explica el informe de la Bolsa.

En cuanto al mercado formal, el problema es que la mayoría de los empleos perdidos no son por despidos, que están prohibidos por decreto, sino por la desaparición de las empresas. Esto implica que, a mediano plazo, lo más probable es que si los niveles de ocupación mejoran, sea más en el sector informal que en el registrado.

“Ya en la fase de recuperación, la dinámica del mercado laboral será dominada por los flujos de trabajadores desde el desempleo y por otras categorías ocupacionales hacia la informalidad. Superada la crisis sanitaria, es probable que encontremos un mercado laboral con más informalidad y con poca creación de empleo formal”, resume el informe.

Un dato relevante, por ejemplo, es que el número de cotizantes dependientes de la seguridad social se redujo en 1,07 millones de trabajadores entre marzo y abril, lo que se asocia principalmente a suspensiones de personal. Es un indicio de que podría haber más destrucción del empleo formal.

Estrategias

Mientras tanto, la necesidad de ajuste que tienen muchas empresas lleva a pensar en programas de retiros voluntarios.

Sin embargo, para el consultor de recursos humanos Martín Poncio, es una herramienta que sólo está al alcance de las grandes empresas por el costo financiero que conlleva.

Por su parte, Alejandro Lanzaco, director de Consultores de Empresas, reconoció que están teniendo mayor demanda de empresas que buscan el servicio de outplacement, es decir, asesoramiento y asistencia para que las personas que se quedan sin trabajo puedan reinsertarse en el mercado laboral.

Fuente: www.lavoz.com.ar