La FeNaT-CTA sigue abriendo cauces de participación popular en Córdoba

La Federación Nacional Territorial (FeNaT-CTA Autónoma) sigue construyendo poder popular en la provincia fortaleciendo la unidad de la clase trabajadora, de sus sectores más explotados que habitan en las barriadas humildes de la periferia de las grandes ciudades y localidades más pequeñas. Que pelean por un pedazo de tierra para levantar el techo propio y albergar una familia con perspectiva de futuro, por un trabajo genuino que les permita gambetear la desesperanza y hacerle un corte de manga a tanto desamparo. No piden nada del otro mundo. Tener un cacho de paz y felicidad.
Y la organización territorial de la Central acomete la organización popular día a día, con trabajo genuino y real. Sin vender humo ni casarse con nadie. Convencida que nadie regala nada, que, como decía Evita, los derechos no se piden, se conquistan y que la voluntad cuando es colectiva y consciente suele transformarse en invencible.
Mientras algunos creen que la construcción política se hace en la “mesa chica”, cerrando las puertas a la participación, al debate y la reflexión común; arman grandes aparatos para “bajar línea” de arriba hacia abajo; o pontifican que nada se puede lograr en favor de los humillados y ofendidos si no se tiene un puesto en el Gobierno de turno, la FeNaT-CTA intenta, no sin dificultades, recorrer un camino autónomo, que no es neutral ni indiferente a lo que pasa, pero que se sustenta en consolidar la fuerza propia, donde nadie es más que nadie, abriendo los cauces al protagonismo popular.
Reclamando a los de arriba la restitución de derechos y garantías, en los despachos oficiales o en la calle, pero, sobre todo, organizando por abajo el poder de los que no tienen nada.
Avanzar, recalcular, seguir caminando. Y reconocer las verdades que encierra lo que decía el incomparable maestro uruguayo Don Alfredo Zitarrosa: “No hay cosa más sin apuro, que un pueblo haciendo la historia”.

Dos nuevos espacios

La Federación que coordina a nivel provincial la compañera Silvia Alcoba, acaba de anunciar que “nos encontramos creando dos nuevos espacios propios: Uno en el Barrio ‘Villa Nailon’ en la ciudad de Córdoba y, el otro, en el Barrio San Martín de Río Cuarto”.
“Sabemos que la salida es colectiva y que la manera de hacerlo es la organización de los compañeros y compañeras. Ya no sólo revolviendo la olla para dar de comer y paliar el hambre de nuestra gente, sino que también lo hacemos generando y construyendo posibilidades para que los trabajadores y trabajadoras de los barrios puedan acceder a esos derechos vulnerados y negados, como lo es el acceso a la vivienda”, enfatizó Alcoba.
“Mientras unos ya están fabricando ladrillos con sus propias manos, otros, con sus propias manos, producen sus propios alimentos apostando a la Soberanía Alimentaria”, expresó la Secretaria General de la CTA Autónoma Regional Río Cuarto.
Y sentenció: “En cada Merendero y Comedor Comunitario la olla se llena de solidaridad porque el hambre es un crimen que sigue afectando a cientos y cientos de familias en nuestra Córdoba. Sobre todo a los pibes y a los viejos, los dos extremos más vulnerables de la pirámide social”.