Que la lucha se haga visible

Por Néstor Pérez*

Se avecina un día en que nos saludarán con consideración y respeto (puede que muchos lo hagan para halagar el costado más egocéntrico del trabajador que me ocupa); esa jornada, en unos pocos días, nos palmearán la espalda, nos dirán de sus preferencias y sus “cancelados” en el oficio abrazado; nos harán saber lo que hay que hacer para cumplir tarea tan sensible (creyendo que lo saben); con entusiasmo se pronunciarán sobre nuestra “bizarría” para  abordar lo que otros ignoran con afán; con indignación señalarán la estulticia -lo menos grave-, o la canallada de otros que visten ropajes populares cuando operan al servicio de la opresión sin matices.

Ese día quizás colectivamente nos hagamos visible simplemente por ser sujetos políticos con demasiada responsabilidad, sin recibir a cambio otra cosa que salarios de hambre.

El próximo martes 7 de junio será el Día del Periodista. De eso hablo más arriba, si tuvieron la paciencia de llegar hasta acá.

Sumergido nuestro salario básico bajo la línea de la pobreza, la emergencia del momento es por nosotros mismos. Al tiempo que sacamos a la luz los conflictos por la subsistencia de tantos otros argentinos.

Esa es la lucha la que necesitamos se haga visible: La de los trabajadores y trabajadoras de prensa, quienes viven en las redacciones sofocados por tensiones que degradan la condición de hombres y mujeres puestos a informar.

Y solo hablamos de alimentos. Nada sobre la exigencia de estar a la altura de los acontecimientos proveyéndonos de material: Libros, cursos, contactos de esclarecimiento o formación.

El martes 7 de junio cuando saludes a un periodista o una periodista, no olvides que nos quieren silentes e invisibles cuando de nuestro derecho a salario digno se trata.

Hacete “cómplice” de nuestro reclamo. Un pueblo nunca podrá ser libre acorralando las pretensiones de sus trabajadores/as.

*Periodista. Escritor