Yacobs: “Luchamos contra la dictadura del neoliberalismo”

La actual Conducción Provincial de la CTA Autónoma Córdoba promovió la apertura de la Comisión Ejecutiva Local de la Central Punilla-Paravachasca. Su Secretario General es el periodista y luchador ambiental Juan Yacobs, quien explica con sobrados argumentos la situación por la que atraviesan los sectores populares en esos valles serranos conocidos a nivel nacional por sus paisajes paradisíacos y donde se enseñorea la impunidad de los poderosos.

“El avance extractivista tiene su capítulo particular en los valles de Punilla y Paravachasca. En primer lugar, el avance de la obra del IIRSA denominada Autovía de Punilla guarda una relación directa con el compromiso asumido de licuar la gigantesca Deuda Externa del país, sumada a la falta de un desarrollo de nuestra industria nacional que nos permita una mayor soberanía de las divisas internacionales y de trabajo genuino. Lamentablemente, el esquema de la globalización actual a la que nosotros definimos como dictadura del neoliberalismo, ha puesto toda su mirada en los recursos naturales existentes en la Argentina y lo que vemos a nivel general es un avance descontrolado de la minería, la actividad petrolera y el agronegocio con un absoluto aval e impulso de quienes deberían protegernos: La Justicia y los gobiernos de turno”, señaló Yacobs.

Y agregó: “En ese marco, la Autovía de Punilla nos ubica como CTA-A local ante el desafío de mantener nuestros principios de soberanía y defensa coherente e irrestricta de la participación ciudadana, de pugnar por una democracia con dignidad para los sectores más desprotegidos. Así es que nos hemos sumado a acompañar a los sectores campesinos, indígenas y ambientalistas para detener por todos los medios posibles esta Autovía que viene a imponernos una nueva geografía y una nueva forma de vida para nuestras poblaciones. No es una pelea fácil, del otro lado tenemos al Gobierno Nacional, Provincial, a los intendentes locales, a la Corporación Andina de Fomento, los especuladores del agro, a los medios masivos, a las empresas contratistas eternas del Estado como Roggio y Chediak y a la Justicia cómplice. A esta altura del avance de esta obra ilegal, a pesar de que no hemos podido detener definitivamente su avance y la suspensión del proyecto, pudimos ralentizar las obras con bloqueos, movilizaciones, visibilizaciones soportando la brutal violencia policial con que se pretende subsanar la falta de consenso local a esta obra, por la que fuimos detenidos, reprimidos y hasta perseguidos judicialmente por el régimen cordobés”.

Según Yacobs, “el sector privado resulta central para nuestro involucramiento con la sociedad toda. Tanto en Punilla como en Paravachasca, los trabajadores del sector privado en las industrias del turismo y gastronómica, es absolutamente mayoritaria y son las principales actividades económicas de la región. Allí vemos una precarización alarmante que requiere de acciones inmediatas. Lo mismo sucede con los trabajadores de la construcción. Hablamos de un esquema de esclavitud estructural que existe en el sector privado de la zona, que es realmente inaceptable y que se traduce en generaciones enteras mal alimentadas, sin esperanzas, sin educación ni futuro”.

“Como trabajador y delegado de prensa cada vez se hace más difícil realizar nuestra tarea, discriminados por los municipios, se nos impide cubrir de manera profesional los acontecimientos, mientras somos amenazados, discriminados e inclusive como ha pasado en Punilla, con trabajadores de prensa detenidos e imputados por realizar su labor de manera independiente. En la Punilla feudal de los Caserio y los Decara, parece que existen algunos resabios de esa sociedad atrasada. El modelo económico implementado presenta condiciones laborales escasamente dignas o justas”, indicó el director de Radio Panamericana de Huerta Grande.

La juventud, el movimiento de mujeres, las asambleas ambientalistas han cobrado importancia en la constitución del nuevo sujeto social.

“Estos movimientos que surgen a partir de la nueva crisis civilizatoria del sistema capitalista, bajo el ocaso de los sueños liberales de fraternidad e igualdad, son los espacios dinamizadores, el nuevo sujeto político de cambio que se incorpora a la estrategia emprendida por el conjunto de la clase trabajadora en las últimas décadas. En el Valle de Punilla esto puede verse con mayor claridad, dado que nuestra conflictividad sucede en ese campo discursivo. No contamos aquí con una clase de trabajadores asalariados como podíamos reconocer hasta la década del 70. En este nuevo cuadro del post desarrollismo, del post capitalismo industrial para dar paso al capitalismo especulativo, emergen nuevos sujetos políticos a los que debemos acompañar, para dar lugar así a las expresiones políticas que van a ampliar nuestra base de sustentación para no perder claridad política, en un sentido estrictamente progresista y emancipador”, redondeó Yacobs.