“Como cada año, desde 1904, este 20 de septiembre se vuelve a conmemorar el Día Nacional del Jubilados y la Jubiladas. El contexto económico, político y social en el cual nos encontramos castiga con dureza a quienes estamos jubilados o pensionados. Basta señalar los magros montos que cobramos la mayoría de nosotros, salvo los privilegiados de siempre.Los años vividos nos han llevado a una posición que nos permite decir, con mucha claridad, que la democracia tiene que trabajar para mejorar la calidad de vida de las mayorías en tiempos acordes a la vida promedio del ser humano.
“Debemos construir una sociedad justa para poder disfrutarla nosotros y que así la hereden nuestros nietos. Quienes ya tenemos varios años conocemos de décadas de postergaciones y esperas de tiempos mejores que no terminan de concretarse. Nosotros ya aportamos mucho, no estamos para que nos dejen en las listas de espera.
“Los jubilados en general cobramos bajos ingresos y vemos que los proyectos políticos en danza no ofrecen profundas mejoras que nos beneficien. A nivel nacional notamos como los recursos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) son dirigidos a gastos que no fueron los pensados en su creación. Aunque esos fondos pertenecen a los jubilados, no somos consultados para darles esos destinos.
“Por parte de la provincia vemos, entre otras tantas problemáticas, que el diferimiento del pago de los aumentos ganados por los trabajadores activos está detenido hasta diciembre pero regresará en diciembre. Castigar con esto a los jubilados provinciales no tiene nombre, es algo muy injusto y hasta perverso en el marco de la crisis económica actual. Los jubilados igual celebramos nuestro día, pero convencidos de que debemos fortalecer nuestras organizaciones y demandar por el respeto de nuestros derechos.
“No somos pasivos, somos trabajadores que aportamos a un sistema solidario para recibir el beneficio de jubilaciones dignas. No dejaremos de luchar por esto y defender el sistema jubilatorio solidario, el mismo que debe ser fortalecido. Aunque tenemos un dejo de tristeza que no nos podemos sacar de encima, es el que nos produce ver a varios sindicatos que se olvidan de los derechos de los jubilados, pareciera que han conquistado la eterna juventud y que ellos nunca llegarán a jubilarse.
“Por momentos es difícil entender esa actitud de poca solidaridad con los jubilados, salvamos las excepciones como los casos de la Unión de Trabajadores de Estados Municipales (UTEM-CTAA) y UEPC, entre otros. Pero en muchos casos ni nos atienden en las sedes sindicales si vamos con reclamos sectoriales”, concluye la declaración del Centro de Jubilados y Pensionados Municipales del Interior de la Provincia de Córdoba, organización enrolada en la CTA Autónoma.