¿Las mujeres, niñas y diversidades habitamos del mismo modo el espacio público? ¿Cómo transitamos nuestros territorios? Son las preguntas que plantea CISCSA (Centro para el Intercambio y Servicios para el Cono Sur Argentina), una organización sin fines de lucro que contribuye al fortalecimiento de las voces y organizaciones de mujeres y a la incidencia en políticas públicas vinculadas al derecho de las mujeres a la ciudad y el hábitat desde una perspectiva crítica y feminista.
La organización aborda el derecho de las mujeres a la ciudad y a una vida libre de violencias desde un enfoque interseccional y latinoamericano, aportando argumentos y propuestas que visibilizan discriminaciones y opresiones múltiples. El proyecto de CISCSA, llamado Somos Territorios, está generando espacios de articulación entre organizaciones, grupos de mujeres, funcionarios/as públicos de gobiernos locales y organizaciones de la sociedad civil de tres regiones de la Provincia de Córdoba: Río Cuarto, Villa María y Cruz del Eje.
El jueves pasado, en marco del Día de la Ciudad, diferentes organizaciones de mujeres y disidencias de la ciudad de Río Cuarto que son parte de Somos Territorios se reunieron en la sede de la CTA Autónoma, entre ellas la FeNaT-CTA, el Comedor Ilusiones, el Centro Comunitario Arveja Esperanza, Promotoras Territoriales Micaela García, Sedronar y el PIT (Programa de Inclusión y Terminalidad Educativa). El eje de trabajo de este tercer encuentro fue el “territorio-cuerpo”, ahí donde dejan huellas los despojos, las injusticias que vivimos y las opresiones. “Nuestro cuerpo es el primer territorio a recuperar y es donde nos habitan y se crean las luchas, las resistencias, la búsqueda de autonomía, el deseo y el disfrute”, explican desde CISCSA.
En este sentido, la organización socioterritorial de la FeNaT hizo una bandera de resistencia contra la violencia obstétrica, con las leyendas “parir no es un trámite”, “vivas nos queremos”.
Cotidianamente, las mujeres, jóvenes, niñas y diversidades viven desigualdades, discriminaciones y violencias que las atraviesan en los diferentes territorios que habitan: en los cuerpos, las casas, los barrios y las ciudades.
En Río Cuarto, CISCSA está desarrollando un proyecto sobre transporte público accesible, de garitas de colectivo seguras en las que se contemple que las mujeres no habitamos del mismo modo el espacio público. “Para las mujeres y diversidades es más inseguro y dificultoso transitar las calles, las plazas o usar los servicios públicos” sugieren desde la organización, y desde el urbanismo feminista proponen planificar las ciudades con perspectiva de género, poniendo en el centro del debate la desigualdad en la vida cotidiana y las violencias que vivimos.
Alerta alerta, la ciudad es nuestra
El proyecto Somos Territorios produce información sobre las violencias que se viven en los espacios públicos, y su impacto diferencial en mujeres, niñas y diversidades a través de mapeos (cartografías colectivas a través de testimonios) para posicionar el tema en la agenda pública. Alerta Alerta, la ciudad es nuestra es una campaña que apunta a sensibilizar en torno a las violencias en el espacio público.
“No queremos vivir más en estado de alerta”, “Queremos recuperar, usar y disfrutar de los espacios públicos”, son algunas de las demandas que componen la campaña. La CTA Autónoma y la Federación Nacional Territorial de Río Cuarto se suman a esta campaña para que toda la sociedad reconozca estas violencias como un problema que requiere el compromiso de todas las personas. Como organización socioterritorial y popular mayormente compuesta por mujeres, la FeNaT está aportando sus voces y perspectivas al proyecto ya que territorios libres de violencias son territorios soberanos, libres de hambre, con techo, tierra y trabajo para las mujeres.
