Un día sin repositores por la igualdad

Los repositores representan el 80% de la fuerza de trabajo que mantiene la góndolas llenas en los grandes supermercados, sin embargo, viven al margen de los derechos.
Los viáticos que cobran es de cuando el boleto del colectivo se pagaba con monedas.
Los controlan por GPS pero les niegan la compensación de las horas demás y los ruteos que realizan donde el transporte público no llega porque -supuestamente- no les consta.
Siempre expuestos a que un informe inventado les afecte su estabilidad, ‘legalice’ la brutal y constante discriminación cotidiana que llevan atada al chaleco como si el termino “Repositor Externo” liberara al resto a hacer y decirles lo que se les venga en gana.
Son los trabajadores con más patrones y jefes que jamás hayan existido.
No tienen delegados. Los pocos que existen están cooptados por las patronales y los otros poquísimos que luchan deben hacerlo contra dos frentes; la empresa y su propio sindicato.
Pero algo está empezando a cambiar, y son ellos mismos, los repositores externos que a lo largo y ancho del país comienzan a tomar conciencia de la importancia de la organización colectiva.
Apoyamos este despertar de un sector de la clase trabajadora invisibilizada por muchos años. Celebramos que alguno de ellos dirija sus sindicatos en los próximos años, ahí estaremos para apoyarlos y continuar construyendo un sindicalismo de nuevo tipo.
Por todo ello, es que la consigna de un #UNDIASINREPOSITORES intenta poner en valor el trabajo que realizan, y sobre todo que el propio repositor externo tome conciencia de su esfuerzo y que sin organización colectiva, jamás será compensado como realmente se lo merece.