Reyes Bernabé Martínez: Recuerdo de un militante

Por Jesús Chirino*

La semana pasada se conmemoró el séptimo aniversario de la desaparición física de un hombre que con su accionar contribuyó a la vida política y gremial de la ciudad.

Su hermano José Roberto Martínez, alguna vez escribió que su “…postura en contra de la explotación del hombre por el hombre… le vino casi desde niño, cuando le envió una carta a Eva Perón solicitándole un trabajo de mensajero en el Correo Central.

Desde entonces, con el pedido concedido, se dedicó a luchar por las reivindicaciones de los trabajadores telepostales siendo uno de los fundadores de ALECyT”.

De este gremio, de los empleados de correo, llegó a ser secretario general y tuvo activa participación en el Cordobazo.

Sus últimos años los pasó en Villa María, desarrollando una activa vida política.

El recuerdo del Flaco  Torriglia

El Diario en la tapa de su edición del 15 de agosto de 2012, dentro de un recuadro negro, publicó un título central que difundió la triste noticia: “Murió Reyes Martínez”. La noche anterior, contando ya con 76 años de edad, “El Gallego” había cerrado sus ojos en una cama de la Clínica de Especialidades de Villa María. No pocos corazones se estrujaron en la ciudad, Reyes Bernabé  Martínez hacía tiempo militaba en el Partido Solidario “Nuevo Encuentro” desde donde integraba la agrupación “Encuentro en Defensa del Proyecto Nacional”. Este villamariense, por opción, cargaba con una larga historia de participación en luchas en defensa de los más humildes y desprotegidos.

Se cumplieron siete años de su partida y aún su figura es nítida entre los militantes que compartieron luchas con Reyes. Días posteriores a su deceso se publicaron conceptuosas notas que recordaban su figura. Una de ellas fue del recordado poeta, periodista y militante Jorge A. Torriglia, dirigente del Partido Comunista Congreso Extraordinario (PCCE). Este escribió rescatándolo como “parte de la memoria del  Partido Comunista de Córdoba y sus luchas, invisibilizadas tanto desde los medios y la derecha como desde la izquierda trotskista”, señala su participación en heroicas gestas de los trabajadores en Córdoba y la continuidad de su lucha en Villa María.

“Cada uno de sus días estuvo destinado, además a construir organización junto a sus compañeros en la práctica del combate contra el neoliberalismo y en las calles -recuérdese 2001-, a dar a conocer sus análisis y reflexiones y posiciones y la de otros compañeros, tanto en cuanto a la política local como nacional e internacional, entretejiendo los recuerdos y lecturas de Lenin, Gramsci, Mao, “el Che” con los caminos y rutas vividas en sus luchas como máximo dirigente sindical del gremio de Correos de Córdoba (exiliado en Italia y la Unión Soviética luego del 76) e integrante de los gremios independientes y en lucha que le ayudaron a Tosco a construir organizaciones de unidad indispensables en aquel tiempo, tal como la intersindical agraria, que le permitieron al líder lucifuercista contar con la fuerza de la unidad con que contribuyeron los comunistas para llegar a los objetivos que logró”.

Reyes Martínez tenía una escritura aguda y con ella ponía al lector en situación de auscultar las vibraciones sociopolíticas de los acontecimientos del momento. Muchas veces escribió en páginas de El Diario, como también era habitual escucharlo intervenir en reuniones políticas e, incluso, en encuentros familiares con una verba prolija, hilvanando conceptos para el análisis de las situaciones más variadas. Su voz ronca, profunda y clara resonaba con brillo en sus largas y conceptuosas intervenciones. Cada vez que tomaba la palabra se notaba su sólida formación teórica que lo llevaba a usar conceptos de pensadores de izquierda como herramientas para la comprensión de cada situación que sometía a análisis.

En la referida nota de Torriglia describe, a grandes trazos, su trayectoria en la ciudad “en Villa María, ciudad en la que vivió en la última década, Reyes ni bien llegado se acercó, junto a su inseparable compañero y amigo Omar Mignola y luego con Luis Lludgar y el Gato Ferradans, a hacer sus aportes de unidad creando el Movimiento Orgánico Vecinal, Independiente y Libre y uniéndose con los sectores que veníamos luchando desde el PC Congreso Extraordinario, el PC y otros, hasta formar la Red de Participación Ciudadana y luego MPSOL, en alianza con referentes peronistas como Carlos Durán, así como organizaciones locales en defensa del patrimonio como la Comisión Amigos del Túnel, llegando a constituir la Multisectorial que terminó de frenar el proyecto neoliberal del Accastello de entonces y más tarde redondear la unidad en torno a una opción electoral municipal junto al Partido Instransigente que, prácticamente, obtuvo la tercera fuerza a la par de la entonces IU”.

Cambiar la sociedad

Su hermano, en nota publicada en El Diario, recordó que “… fue uno de los tantos dirigentes propiciantes del recordado Cordobazo. Fue por esta causa permanentemente perseguido y, no obstante, volcó su vida a las causas populares que le costaron varias encarcelaciones y durante la última dictadura militar debió padecer  el exilio… De vuelta a la patria continuó con su incansable trajín en el campo popular y aunque bregó por su reincorporación a su primer trabajo, jamás lo logró”.

Recordarlo trasciende lo nostálgico y pretende rendir un pequeño homenaje a un hombre que en su larga militancia mantuvo la coherencia y su vocación del trabajo por los otros. Alguien convencido en que puede cambiarse la sociedad y trabajó sin descanso para ello.

*Docente. Periodista. Secretario General de la Unión de Trabajadores de Estados Municipales (UTEM-CTA). Secretario Gremial de la CTA Autónoma Regional Villa María