Periodistas

Por Horacio Meguira*

Una de las libertades más significativas es, sin dudas, la libertad de prensa La censura fue una de las restricciones que llevaron a que su prohibición se convirtiera en una bandera de la Revolución Francesa y de todos los movimientos liberales.

Ahora vemos como el sistema fue generando una mutación de su función. La saturación de información, el uso como instrumento faccioso, sobre todo el dinero como elemento persuasivo a fin de subjetivizar la información, orientar la opinión en beneficio de sectores poderosos.

La destrucción de figuras políticas o liderazgos sociales; la renuncia a la búsqueda de información objetiva (como parte de la renuncia a conocer la verdad).

Sin embargo este modo de ejercer el periodismo convive con profesionales que no se prestan al manoseo y muchos aún conservan y preservan su vocación y la función de informar a la sociedad. Me parece que es tiempo de que los periodistas honestos que aman su profesión establezcan protocolos éticos.

Que sean los pares los que formen tribunales éticos no vinculantes para que la opinión pública se entere del entramado de influencias y poderes que nos expropian del conocimiento de los hechos y de la verdad objetiva.

Sería beneficioso para la sociedad civil conocer cómo se gesta la desinformación y debilitar la competencia desleal de los sobornos que cambian ética periodística por dinero.

*Director del Departamento Jurídico de la CTA Autónoma